A por el segundo puesto

Javier Recio, María Dolores Tortosa, Ignacio Martínez y Lourdes Lucio analizaron ayer durante todo el programa cuáles son las expectativas reales de cada una de las formaciones en el inicio de campaña. Para comentarlas contaron además con las intervenciones telefónicas en directo de los cabezas de lista de cada una de los partidos.

A falta de conocer cómo de determinante puede ser la campaña electoral, todos coinciden en que el PSOE parece que revalidará el primer puesto de las elecciones. Con la encuesta del CIS como telón de fondo, los analistas sostuvieron que Susana Díaz volverá a llevar al PSOE a ser la fuerza más votada;en parte por algunas de las debilidades de sus rivales. «El PSOE no tiene con quién perder», señaló Martínez, con una frase que resumía precisamente esta visión sobre la vida política andaluza.

Sobre la polémica encuesta, Lourdes Lucio señaló que ésta no es sino un elemento más de la campaña. «Pero sobre ella habría que preguntar especialmente a la oposición, que es quién sale perdiendo», añadió la periodista sevillana. En su criterio, tanto PP como Ciudadanos han tomado una «deriva» hacia la derecha. «Eso ha permitido que Susana haya tomado el centro, razón por la que no para de repetir que su campaña es de banda ancha», matizó Lucio.

Sobre este trasvase ideológico dieron cada uno sus datos. A pesar de que Javier Recio no coincidió en este análisis, los otros tres periodistas sí observan que Ciudadanos se ha movido a la derecha, y que en las encuestas ha pasado de una escala intermedia a volcarse tan a la derecha como el Partido Popular.

Pero no solo resulta importante el encuadre, sino el tipo de campaña que se está realizando. «El PP está por una campaña tremendista tipo Trump, en la que se habla de putas y cocaína», argumentó Martínez, que recordó la pregunta de hace unos días de Pablo Casado a Pedro Sánchez sobre si se habían gastado en Andalucía 1.000 millones de euros en estos menesteres.

En este punto, María Dolores Tortosa planteó un análisis interesante. A pesar de que del CIS se desprende que un 56,8 por ciento de los votantes lo harán pensando en temas exclusivamente andaluces (por un 24% que lo harán por temas nacionales), el PP de Casado está planteando, según la periodista de SUR, una «recentralización», que se hace especialmente visible por el uso de las banderas de España (y la ausencia de las andaluzas) en los mítines de estas últimas semanas en Andalucía.

Ello contrasta con la campaña que está realizando el PSOE; que para los cuatro invitados resulta «plana». «Susana no está buscando la crispación porque piensa que no le conviene. Si no se produce nada extraño va a ganar», señaló Lucio, que explicó que ello le hace tener un perfil más bajo que al resto, que se están jugando más que ella. «La oposición necesita un candidato que genere ilusión pero que vaya acompañado de un buen programa, y de momento lo tiene», añadió Tortosa. «Son candidatos que no aportan a la marca», puntualizó Martínez.

Hace unos días, en este mismo periódico, la candidata número 2 del PP de Málaga, Esperanzo Oña, consideró un «misterio» y un «expediente X» el hecho de que el PSOE lleve 36 años gobernando a pesar de que considera que hay un «hartazgo» en la sociedad andaluza. Sin embargo, los cuatro periodistas desgranaron esta cuestión, que en su criterio tiene varias respuestas: una de ellas es, evidentemente, la falta de una alternativa que haya podido convencer a los andaluces. Aunque los populares (y el resto de partidos) defienden que esto se produce por una red clientelar, ello no parece ser la única razón que les haya permitido estar en el poder durante 40 años.

Según Lourdes Lucio, el PSOE de Andalucía es «el partido más profesional de Europa»; una formación con una «extraordinaria capacidad de mutación». Para ello, puso como ejemplo el «yo soy feliz» utilizado por Susana Díaz cuando en las últimas semanas se le ha hecho alguna pregunta más complicada. «Eso lo hacen porque tienen estudios queseñalan que es la mejor respuesta», explicó. Aunque Tortosa concidió en esta lectura, fue un paso más allá. «Hay una máquina de partido más que evidente, pero también hay un vigor personal. Es la candidata con más vigor de todos, y eso se nota», sostuvo la periodista. Aunque los cuatro prefirieron ser cautos –aún pueden pasar cosas durante la campaña– no pudieron evitar hablar de la posible inestabilidad que se producirá en cuanto a los pactos tras las elecciones. Pero sobre ellas, Javier Recio fue muy directo: «El pescado está vendido».