Naturgy niega que el Gobierno les haya planteado entrar en su capital a través de la SEPI

El resultado bruto de explotación (ebitda) del grupo liderado por Francisco Reynés cae solo un 0,1% y alcanza los 2.846 millones. Las ventas ascendieron a 9.071 millones de euros de enero a junio, un 24,7% menos que en 2023 como consecuencia del abaratamiento de la energía en comparación con el récord de precios que se vivió el año pasado.

No han sido meses fáciles para la cotizada sobre la que han sobrevolado diversos rumores de opa y entrada en su capital, como la de la emiratí Taqa que finalmente no salió adelante. Otra de las opciones era la posible entrada del Estado en el accionariado de Naturgy a través de la SEPI (Sociedad Estatal de Participaciones Industriales), pero el presidente y consejero delegado de Naturgy negó cualquier acercamiento del contacto en este sentido.

«Ni se ha dirigido el Gobierno ni la SEPI con la intención de entrar en el accionariado, lo digo con total tranquilidad», aseguró el ejecutivo en la rueda de prensa celebrada en la sede de la compañía en Madrid. Reynés, además destacó que en las empresas energéticas con actividades reguladas «los gobiernos ya mandan mucho por la regulación, algo que hay que tener presente».

Este proceso de conversaciones entre CriteriaCaixa, Taqa y el resto de accionistas empujó a Reynés a renunciar a su bonus plurianual, al que no volverá para asegurar su «libertad»: «Valoro mucho más mi libertad que mi dinero, y quiero seguir teniendo mi libertad», señaló. Asimismo, el ejecutivo subrayó que después del debate abierto hace un año, la figura de un consejero delegado «no está sobre la mesa».

El ejecutivo anunció además que antes de que termine el año lanzarán un nuevo plan estratégico para 2025-2030 que sume las inquietudes de todos los accionistas «que quieran estar en la compañía». El objetivo del plan es «plantear un futuro más ambicioso» y que todos los accionistas, sean quienes sean a partir de 2025, estén «alineados». «Somos una cotizada y todos los accionistas nos merecen respeto, por lo que tenemos que tener un plan que aglutine a todos los que quieran estar con nosotros, no somos quien para decir quién se tiene que ir y quién se tiene que quedar en la compañía», explicó Reynés.

Todo ello permite a la compañía adelantar unos objetivos récord para el conjunto del año por encima de los 1.800 millones de beneficio neto y un ebitda que superará los 5.300 millones. Las inversiones se aceleran hasta los 2.600 millones para este año destinados a actividades vinculadas a la descarbonización, con un aumento de la capacidad en España, Australia y Estados Unidos. Solo en el primer semestre la inversión llegó a los 947 millones enfocada en las renovables.

Naturgy destaca que este año está marcado por la bajada del precio de la energía en comparación con 2023, tanto de gas como de electricidad, lo que supone un «escenario energético más desafiante». Así, tras la volatilidad de los últimos dos años, los precios se han «reequilibrado» hacia los niveles anteriores a la crisis, pero «siguen siendo sensibles a la evolución de la situación mundial». En este contexto, Naturgy ha anunciado que elaborará un nuevo plan estratégico para 2025-2030 que será comunicado antes de fin de año con una hoja de ruta «ambiciosa y atractiva que cree valor para todos los accionistas».

En este sentido, el consejo de administración de la energética ha aprobado un primer pago del dividendo correspondiente al ejercicio 2024 por 0,5 euros por acción que se abonará el 1 de agosto. La energética tiene establecido un dividendo anual para el periodo 2023-2025 de un mínimo de 1,40 euros por título. Los buenos resultados presentados hicieron subir un 2% a la energética en la apertura de la sesión de Bolsa, hasta los 22,4 euros por acción, aunque este alza se ha ido moderando a lo largo de la mañana.