Más de 2.000 nuevos autónomos cada mes para recibir la nueva ley

Tras cinco años de fuerte caída, desde el año 2013 este colectivo viene experimentando un continuo ascenso, pero también es cierto que la mejoría económica ha frenado fuertemente este ritmo. Así, si en 2014 y 2015 el alza era superior al 2%, en estos dos últimos años se ha reducido casi un tercio y permanece estancado en el 0,77%. Parece que el autoempleo se convirtió al principio en una solución para el elevado paro y, ahora que el mercado laboral se recupera, muchos prefieren trabajar por cuenta ajena.

Y es que en los peores años de la crisis se perdieron más de 360.000 autónomos; pasaron de los más de 3,4 millones en 2008 a los poco más de 3 millones en 2013. A partir de ahí comenzó una recuperación paralela a la económica, pero a día de hoy se ha recobrado poco más de la mitad: 185.000 emprendedores más en cuatro años. Sin embargo, la nueva ley de medidas urgentes para este colectivo podría ser un espaldarazo para esas personas que quieren emprender y no terminan de dar el paso, pues, entre otras medidas, se amplía la tarifa plana de 50 euros de seis meses a un año, habrá deducciones fiscales para aquellos que trabajen en casa en sus facturas de agua, gas, luz y teléfono, será más sencillo cambiarse de base de cotización y habrá mayor flexibilidad para darse de alta y de baja en la Seguridad Social.

Quienes cada vez son más proclives a crear su propio negocio son las mujeres. Así, mientras los hombres aún están lejos de recuperar los niveles de antes de la crisis y hay 200.000 autónomos menos, las emprendedoras no solo es que hayan recobrado todo lo perdido, sino que lo han superado. En la actualidad hay 35.000 más que en 2008 y ya hay más mujeres en este colectivo que nunca. Así, tal y como explicó este verano la ministra de Empleo, Fátima Báñez, «estamos en récord histórico y casi dos de cada tres nuevos emprendedores en España son mujeres». De hecho, si el porcentaje de autónomas en la UE se situó en el 31,3% en 2016, el de España lo supera por más de dos puntos porcentuales al colocarse en el 33,6%, el mismo nivel que Alemania y más que Reino Unido (33,5%), Francia (32,9%) e Italia (30,9%).

Otro colectivo que ha contribuido a engordar las listas de autónomos son los jóvenes, pues cerca de 450.000 se han acogido a la tarifa plana desde que se creó en 2013. Pese a ello, el perfil de estos profesionales sigue siendo, en su mayoría, el de una persona de mayor edad. De los dos millones de emprendedores que son personas físicas, ni siquiera tres de cada diez tienen menos de 30 años. Por el contrario, una cuarta parte cuentan con más de 55 y siete de cada diez superan los 40.

Quienes están influyendo poderosamente en el crecimiento de los emprendedores son los extranjeros. Así, casi la mitad del alza entre enero y junio fue gracias a los foráneos: si durante los seis primeros meses del año el RETA aumentó en más de 44.000 afiliados, más de 19.000 procedían de otro país.

Por actividades, la gran mayoría se decanta por abrir un comercio, puesto que uno de cada cuatro está encuadrado en este sector. A continuación le sigue la construcción, al que pertenecen uno de cada diez. En tercer lugar está la hostelería, que aglutina a más de 330.000 de los 3,2 millones de emprendedores.

En estos años está incrementándose el número de profesionales que se hacen autónomos y en el último aumentó un 3% (un 33% desde 2009) en el ámbito de la ciencia y la tecnología donde ya suman más de 270.000. Por el contrario, en la agricultura han caído un 10% desde 2009 y pasan a ocupar el quinto lugar.

Por comunidades, el volumen de población sí importa. Así, Cataluña es la región que más emprendedores acumula a junio de 2017 (más de 550.000), seguida de Andalucía (516.000) y Madrid (385.000).