Fenati, el más listo en la última curva

Los primeros compases obedecieron al guion habitual, con Fenati, Miller y Efrén Vázquez por delante, con Álex Rins teniendo que remontar tras una mala salida y con Eric Granado y Antonelli por los suelos en las vueltas iniciales. Lo de siempre.

Fue imposible establecer un orden de carrera hasta la recta final puesto que junto a los pilotos antes mencionados se marchaban otros como Bagnaia, Isaac Viñales, Kornfeil y así hasta una decena entre los que no se encontraba Loi, desaparecido tras su cuarto puesto en Argentina y terminando con cero puntos y por los suelos.

El grupo se convirtió en uno de cinco, pero en las últimas cuatro vueltas volvían a ser ocho los que lucharían por la victoria. Los más activos eran Fenati, Efrén y Rins. El líder del Mundial, Jack Miller, esperaba de forma prudente, e Isaac Viñales iba subiéndose por los pianos y con exceso de actividad. Haciendo la goma se hallaban Bagnaia y Alex Márquez, un poco peor que en los últimos Grandes Premios.

A tres vueltas del final Miller atacó a Efrén Vázquez, y ambos permitieron a Viñales colarse por delante de ellos y a Rins y a Fenati abrir un pequeño hueco en un dúo que el vasco pudo alcanzar en la última vuelta.

Toda la carrera iba a decidirse en la última curva. Rins apuró más y se puso primero, pero entró colado, algo que acabó por condenarle al tercer puesto del cajón. Efrén Vázquez aprovechó la escaramuza para ser segundo, y Fenati logró su segunda victoria consecutiva. Detrás, Miller quedaba cuarto por delante de Isaac Viñales. Hay Mundial.