Un laureado malagueño tras los 'RedSticks'

Quizá para muchos sea un desconocido, pero lo cierto es que, en la historia del hockey malagueño, andaluz, e incluso nacional, es una cara reconocida. Se trata de Diego Gavilán, ahora con 47 años, que hace casi dos décadas llegó a ser internacional absoluto, que fue pilar fundamental de la mejor plantilla histórica del Club Hockey Benalmádena y que, desde diciembre de 2022, trabaja como analista de vídeo de los 'RedSticks'… Entre otros tantos oficios.

Gavilán conoció esta disciplina, como otros tantos niños de la época, como una actividad extraescolar más de las que ofertaba el Colegio Maravillas. No tardó en enamorarse de este deporte y, con el ánimo de probar hasta dónde podría llegar, se alistó al club local, el Hockey Benalmádena, al que, sin saberlo entonces, acabaría ligado de por vida. Por un lado, como uno de los 'héroes' del único ascenso del equipo a la División de Honor A, la élite (2010), en la que compitieron dos años. Por otro lado, como gerente a día de hoy.

Diego siempre ha tenido una capacidad encomiable para compaginar varias tareas a la vez. Al igual que a día de hoy trabaja hasta en tres sitios distintos, en su juventud estudió Administración y Dirección de Empresas y trabajó en un grupo hostelero mientras competía con el equipo… ¡Hasta los 37 años! No sólo fue tardía su retirada, también su llegada al equipo nacional, con el que debutó a los 29 años. «Fue en un Campeonato de España cuando el seleccionador habló con mi entrenador del club, y fue una sorpresa, nadie se lo esperaba. Me dijo, '¿Tienes algo que hacer la semana que viene? Pues te vas a Viena, al Campeonato del Mundo'». En la cita austríaca de hockey-sala de 2007 hizo historia formando parte de la selección absoluta que se alzó con el bronce mundial. Después de aquella grata experiencia, participó en dos grandes citas más, los Europeos de Holanda y de Rusia, acabando cuarto en ambos casos.

En 2015 colgó el 'stick'. «Cambió mi estilo de vida, rompí con la empresa en la que trabajaba, me puse a estudiar TAFAD y lo compaginé con el mundo del hockey, aunque a partir de entonces, como entrenador. Comencé como seleccionador andaluz desde sub-14 hasta sub-18 y después me llegó la oportunidad de trabajar como videoanalista de la Federación Española», relata. Comenzó a trabajar con los equipos de categorías inferiores y ya en 2022, se unió al combinado absoluto masculino, con el que ya ha viajado a un Europeo, la ProLeague (liga mundial) del año pasado, y la joya de la corona, los Juegos de París, donde el equipo obtuvo un cuarto puesto.

¿Su labor como analista de vídeo? Graba partidos, codifica, selecciona jugadas de equipos contrarios para que la selección pueda estudiarlos… Una labor indispensable para el seleccionador, que además, compagina con la gerencia del Club Hockey Benalmádena y con la Federación Andaluza, dado que es seleccionador sub-18 y responsable de la tecnificación autonómica.

Es, desde luego, una voz autorizada para responder a la pregunta sobre la salud del hockey en Andalucía, y en concreto en Málaga, donde a pesar de haber tenido referentes icónicos como las olímpicas Mari Carmen Barea o Pilar Sánchez Cervi, puede decirse que vamos muy por detrás de las grandes potencias nacionales: Madrid y Cataluña. «Por tradición, estas comunidades tienen mucha cantidad de clubes, y la suerte que ellos tienen con respecto a Andalucía es que en un radio más pequeño, tienen muchos clubes», valora.

A pesar de esto, en cierto modo, es optimista con la labor que se está haciendo en la actualidad: «En Málaga, concretamente, podemos estar contentos. Tenemos varios clubes, dos en Málaga capital que están creciendo, y nosotros que seguimos en liga nacional. De las 1.500 licencias que tendremos en Andalucía, unas 500 son de aquí de Málaga. ¿Qué nos gustaría tener más? Sí, para ello necesitamos más promoción, visibilidad…». Entre los grandes hándicaps de Málaga o Andalucía con este deporte, Gavilán destaca aspectos como las largas distancias dentro de la comunidad para medirte a otros clubes, y la falta de apoyos económicos desde el sector privado.

Eso sí, esto no impediría que, en un futuro cercano, podamos ver a un club en la élite, como es el caso de RH Privé Benalmádena (en Segunda) o a algún jugador despuntando a nivel nacional. De nuevo, el malagueño piensa en positivo: «Seguro que sí, que el club volverá a la élite y que veremos a algún jugador destacado dando el salto algún día. Tenemos ya algunos niños que ha estado en selecciones inferiores. Se está trabajando mucho en ello».