Bea González, Fran Guerrero y Jairo Bautista se despiden de Kuwait

Eso sí, toca poner en relieve la hazaña que lograron en este torneo Guerrero y Bautista, por encima de la derrota de este sábado. Y es que el benalmadense y el coineño, única pareja exclusivamente malagueña en la élite y aun siendo la dupla nº 17 del 'ranking' mundial, lograron eliminar a dos cabezas de serie de la cita, las parejas número 3 (Juan Lebrón y Martín Di Nenno) y número 6 (Coki Nieto y Jon Sanz). Toda una gesta que les llevó a convertirse en la sorpresa del torneo y a entrar en las primeras semifinales de un P1 en su carrera.

Por desgracia, y aun plantando cara ante los líderes del 'ranking', esta vez no consiguieron dar la campanada ante Arturo Coello y Agus Tapia. Cayeron por un doble 6-2, eso sí, con inicio de set bastante igualado, con puntos convertidos en auténticos 'rallyes' y sin tirar la toalla hasta el cierre del partido, llegando a luchar por sumar un juego más en el segundo set cuando iban 5-1 abajo.

En el caso de Bea González y Delfi Brea cabe destacar el gran estado de forma en el que ha vuelto la malagueña y nº6 del mundo tras su lesión (fue campeona en el último P1 de Dubái). Sin embargo, este sábado, sencillamente, fue un partido para borrar el de la dupla hispano-argentina. Lejos de ser una batalla igualada, como suele ser habitual en este duelo entre las duplas número 3 y 4 del mundo, el duelo resultó toda una exhibición por parte de Gemma Triay y la jovencísima Claudia Fernández. Con autoridad y mucha seguridad, firmaron un partido redondo en el que lograron frustrar a la pareja rival, que no llegó a sacar a la luz su verdadero juego en ningún momento del partido.

Sufrieron un doloroso 6-0 en el primer set y un parcial de 9-0 González y Brea, que aunque sacaron garra para rascar al menos dos juegos en la segunda manga y plantar un 3-2, no consiguieron consumar la reacción. Acabaron cayendo por 6-0 y 6-2, acusando el exceso de errores no forzador y pagando por el cansancio de tanto partido seguido y de la batalla de casi tres horas del día anterior para llegar a estas nuevas semifinales.