El Balonmano Ciudad de Málaga reclama «tranquilidad» en un comunicado

«El club quiere mandar un mensaje de tranquilidad ante las informacioneaparecidas en los distintos medios de comunicación (...). Asimismo, informamos que la entidad está siguiendo todos los protocolos marcados por el SAS (Servicio Andaluz de Salud) y está en contacto permanente con la Real Federación Española de Balonmano, a través de su presidente y de los servicios médicos. Los dos jugadores que han dado positivo se encuentran bien, recluidos en sus respectivos domicilios y siguiendo las instrucciones médicas«, afirma la nota.

Entrando en detalle sobre la situación generada en el equipo, la nota aclara que «el área médica del club está haciendo un seguimiento exhaustivo a los jugadores para controlar el foco que ha surgido entre los jugadores de la primera plantilla. Tal y como han revelado los medios de comunicación social, el SAS ha practicado la prueba del Covid-19 a dos jugadores del equipo, cuyo resultados han sido positivo. Al parecer, todo viene a raíz de un viaje realizado a Italia por un miembro de la primera plantilla. Aunque a su llegada a Málaga este jugador no presentó síntomas y se incorporó a los entrenamientos, en días posteriores comenzaron a sentirse mal algunos compañeros del equipo, y más adelante, el propio jugador que viajó a Italia. Desde entonces, se han practicados las medidas indicadas por el SAS y se seguirán efectuando la prueba del Covid-19 al resto de componentes de la plantilla aquejados estos días (cerca de una decena)«.

Por ello se ha aplazado el choque del sábado pasado del Trops en su cancha ante el Barcelona B y «se volverá a solicitar el aplazamiento del partido del próximo sábado, ante el Amenabar Zarautz, en Guipúzcoa». Asimismo, la nota aclara que «el club se ha puesto en contacto con los equipos con los que compitió en semanas posteriores a la llegada del jugador que viajó a Italia; es decir, el Club Cisne de Pontevedra y el Conservas Alsur Antequera». Finalmente, la nota pide preservar el derecho de intimidad de los dos jugadores afectados sin revelar su nombre y reclama «tranquilidad».