La ambición sin límites de Duane Rocha

La deportista del UCAMFuensanta logró la mínima durante las series matinales del sábado en su prueba fetiche, los 200 espalda (2:09.82), aunque no pudo rebajar su tiempo en la final y el martes se quedó a solo 26 centésimas de la mínima en los 100 espalda (hizo 1:00.33). «Quería arañar un poco mi tiempo en el 100. En el 200, por la mañana logré la mínima olímpica y luego por la tarde no supe reaccionar en la final. Creo que no estuve lo suficientemente concentrada y eso me impide estar contenta del todo», dice. «Quizás aún no he mirado mi clasificación para Río con cierta distancia, pero así somos los deportistas, somos muy ambiciosos, siempre queremos más. Es cierto que he logrado mi primer gran objetivo del año, pero me voy con un poco de mal sabor de boca», explica la nadadora.

Las palabras de esta nadadora, campeona de Europa de los 200 espalda en 2014, denotan una gran confianza en sus posibilidades y en todas las horas de trabajo empleadas en el Centro de Alto Rendimiento de Sant Cugat, a las órdenes de José Antonio del Castillo, con el que ha empezado a trabajar esta temporada. «Mi último año no fue precisamente sobre ruedas. Había motivos para dudar, porque no salían las cosas como me habría gustado», comenta. Duane cambió de entorno a mediados de 2015 se marchó a Barcelona, cambió de grupo de trabajo y de entrenador. Y se adaptó bien a esas modificaciones, algo nada fácil para un nadador: «He confiado mucho en mi entrenador y él ha confiado en mí. Creyó mucho en mí en todo momento y ha sido un gran apoyo», relata.

En Sabadell, no hubo tiempo para celebraciones por su mínima olímpica, ya que competía el martes, la última jornada y el cansancio se acumulaba «solo tenía ganas de dormir», admite. Al menos en el Campeonato de España pudo estar acompañada de sus padres, que ejercieron de talismán, ya que la última vez que vieron a su hija nadar en directo fue cuando logró la clasificación para Londres 2012.

Ahora apenas tendrá unos pocos días de descanso antes de volver la próxima semana a Barcelona. Volverá la rutina, las horas de entrenamiento, todo enfocado a Río 2016. Antes, en mayo, tratará de lograr la mínima en los 100 espalda en el Europeo de Londres. Pero, pase lo que pase allí, en verano estará compitiendo en Brasil. «Que los Juegos sean en una ciudad como Río de Janeiro es increíble y que vaya a competir en mi país natal es algo especial. Pero ahora mismo ni siquiera logro visualizarme allí, aún queda mucho...», concluye la deportista mijeña.