Ángel Hidalgo: «Ese niño de Marbella lo soñó, pero no sabía que podía conseguirlo»

–¿Cómo ha sido el día después de coronarse campeón? Esa resaca de éxito.

–Pues muy bien. Estoy muy contento y orgulloso por conseguirlo y por ver que el trabajo que hemos hecho ha merecido la pena y que ha dado sus frutos. Hemos podido celebrarlo poco, menos de lo que nos gustaría, pero muy bien porque me voy a Escocia ahora para jugar otro torneo. No me ha dado demasiado tiempo.

–Ha experimentado un crecimiento brutal en el 'ranking' después de esta gesta.

–Bueno, al final es lo que conlleva el ganar. Se han abierto nuevas puertas y nuevas oportunidades y la verdad es que tengo muchas ganas de afrontar esta recta final y de ver hasta dónde podemos llegar.

–¿Qué pensaría ese niño de Marbella que empezó a jugar con solo dos años? ¿Se lo hubiera esperado?

–Bueno, ese niño de Marbella lo soñó, pero no sabía que podía conseguirlo. Ahora se ha dado cuenta de que es capaz y de que puede conseguirlo, y entonces subirá las expectativas y querrá más.

–¿Cómo vivió el transcurso del campeonato una vez empezó?

–Pues muy tranquilo, la verdad. Venía en una época en la que le estaba pegando muy bien a la pelota, pero no conseguía cuadrar los resultados. Y muy contento por cómo he estado jugando toda la semana y cómo iban pasando poco a poco los días, con más opciones reales de estar en la lucha por el torneo. Y al final, junto a Jon, nos lo conseguimos llevar.

–¿Cuáles han sido su mejor y su peor momento del torneo?

–Mi mejor momento fue el comienzo del primer día, que fue el que me dio ese impulso para el torneo con esos nueve primeros hoyos del jueves, y el 'play-off' del domingo, que se me quedará grabado para toda la vida, y eso no lo olvidaré nunca. Y el peor yo creo que fue el comienzo del domingo, que no fue el deseado. No conseguía encontrar el ritmo para cuadrar la cara del palo con la bola, y eso nos hizo perder un poco la ventaja que teníamos. Pasar de liderar a estar tres por detrás.

–¿Confiaba en sus opciones antes del comienzo de este Open de España?

–Evidentemente no. No era uno de los favoritos y ni mucho menos estando Jon Rahm jugando, pero bueno, conforme pasaron los días la confianza subió y me di cuenta de que podía competir de tú a tú... Y llevarme el torneo a casa.

–Jon Rahm, además de ser el favorito, era un ídolo de su infancia. Se ha hecho viral una foto suya con él cuando era pequeño.

–Aunque sólo nos separen tres años, él ha conseguido muchas cosas desde joven. Siempre ha sido un referente y sí, la verdad es que compartir partido y 'play-off' con él fue algo bastante emotivo.

–¿Cómo se presenta su calendario de aquí a que acabe la temporada?

–Escocia, París, Sotogrande y Corea. Y con la victoria de ayer nos hemos clasificado para las dos finales de Abu Dhabi y Dubai. Así que ese es el calendario que tengo de aquí a que termine la temporada.

–Imagino que esto será un chute anímico fundamental de cara al futuro.

–Sí, la verdad es que estoy con ganas de ver qué tal el final de temporada. Ojalá que salga todo bien.

–De todos los mensajes que ha recibido tras vencer, ¿ha habido alguno más especial?

–Sí, muchos... Rafa Nadal, Pau Gasol, Alcaraz, Morata... La verdad es que son deportistas que, quieras que no, sueñas con alcanzar algún día lo que ellos han hecho. Y que te reconozcan el trabajo y se alegren de tus éxitos es algo increíble.

–¿Quiénes son sus ídolos deportivos?

–Mis ídolos siempre han sido Tiger (Woods) y Rafa Nadal. El hecho de que compartiera mi publicación y me felicitara ha sido algo muy especial porque desde niño, para la mayoría de deportistas españoles de mi época, Rafa ha sido el rey en ese sentido. El corazón del deporte español. Ha sido algo increíble.

–¿Cómo se ve a sí mismo en lo personal?

–Soy un chico normal de Marbella que ha conseguido algo que nadie pensaba.

–¿Y como golfista?

– Soy un jugador que juega con mucho corazón y muchas ganas, que se intenta ayudar del público para tirar hacia arriba, que lo va a dar todo siempre y que hasta que no caiga la bola en el último hoyo no se va a dar por vencido.

–¿Cuándo tiene pensado pasar por casa?

–Pues no lo sé aún. La idea es volver a final de temporada.

–¿Cómo fue su infancia de la mano del golf?

–Pues empecé en la escuela de Guadalmina, donde me crie. Y allí he estado toda la vida. Ahora llevo un par de años entrenándome en Las Brisas, que soy socio. Guadalmina siempre ha sido la cuna de grandes jugadores, siempre ha habido muy buena escuela y, por suerte, han salido siempre muy buenos jugadores.

–¿Cómo ve la situación del golf en Málaga?

–Azahara Muñoz es una referente. Es de mi club de la infancia y tengo una gran relación con ella. Es una leyenda nacional. Y Ana Peláez es de mi quinta y la conozco desde que tenía cinco o seis años. Lo que está haciendo es increíble, tiene muchísimo potencial y estoy seguro de que no ha llegado a su tope todavía. Le queda mucho por dar.