Brahim plantea interrogantes a Ancelotti y brilla junto a Vinicius

El Real Madrid cerró su gira con una victoria contra el Chelsea tras dos derrotas contra Milan y Barcelona, dejando claro que Brahim Díaz está listo para ser una pieza clave en el equipo. El partido contra los ingleses tuvo poco valor en cuanto a conclusiones para la temporada, pero Brahim emergió como una certeza, demostrando que puede ser igual o más importante que la temporada pasada.

Carlo Ancelotti, fiel a su estilo, alineó un once lo más cercano posible a su idea de equipo base. La sorpresa fue ver a Brahim en una posición de delantero centro, flanqueado por Vinicius y Rodrygo. El partido comenzó con Sterling y Vinicius como los agitadores principales, pero el Madrid se adaptó mejor al paso de los minutos. Brahim falló una oportunidad clara a los 17 minutos, pero poco después, una jugada rocambolesca terminó con un gol atribuido a Ceballos, aunque Lucas Vázquez parecía el verdadero autor.

En ese entorno surgió un soberbio 2-0: un pase extraordinario de Vinicius y una brillante definición de Brahim en el mano a mano. Aunque el Madrid esté lejos de su mejor momento, si encuentra espacios, el rival está condenado. Brahim, decidido a destacar, marcó el segundo con un recorte y un tiro sutil desde un ángulo cerrado. Un partido que había comenzado con un Chelsea dominante se tornó a favor del Madrid. Sin embargo, cerca del descanso, el Chelsea recortó la desventaja con un gol de cabeza de Madueke, en una jugada donde Fran García y Courtois pudieron haber hecho más.

La segunda mitad trajo pocas caras nuevas, salvo la entrada de Lunin, quien salvó el empate nada más comenzar. El partido se tornó quebrado y abierto, con ambos equipos viviendo mejor a la contra. Ancelotti introdujo a varios canteranos en el minuto 65, dando descanso a sus principales figuras. El partido perdió intensidad, pero la ovación a Modric al ser sustituido fue uno de los momentos más destacados.

El sentido práctico del Madrid, que guarda sus mejores esfuerzos para los partidos importantes, se vio reflejado en esta pretemporada. Vinicius, con su excitación constante, fue una luz en el gris rendimiento de los partidos anteriores. Su actuación contra el Chelsea dejó claro que está listo para la temporada, liderando al equipo con su dinamismo y habilidades.

El once de Ancelotti, que cambiará con la llegada de Mbappé, mostró pistas de lo que viene: Brahim en el centro y Rodrygo en la derecha. La gira americana también puso en evidencia a otros jugadores como Endrick, cuya participación fue mínima debido a molestias físicas.

El Chelsea, por su parte, sigue en un proceso de reconstrucción bajo la dirección de Enzo Maresca, quien busca rejuvenecer el equipo tras una inversión millonaria que no ha rendido frutos en la Premier League.

Vinicius Junior, en solo una semana de pretemporada, mostró un nivel excepcional, destacando en cada jugada y manteniendo a su equipo a flote. Su conexión con Brahim fue crucial, y su habilidad para generar oportunidades dejó a la defensa del Chelsea sin respuestas. Coreado por la afición, el brasileño demostró ser una estrella tanto en Europa como en América.

No todo fue positivo. El equipo mostró necesidad de ajustes defensivos. Courtois, aunque brillante en ocasiones, cometió errores inusuales, mientras que Rüdiger y Militao, aunque superiores, mostraron falta de seriedad en algunas jugadas. Fran García tuvo problemas con los balones largos, y la vuelta de Mendy podría complicar su titularidad.

Nico Paz, uno de los canteranos más destacados, aprovechó sus minutos y demostró estar listo para el primer equipo, mostrando calidad y madurez en su juego.

Con la pretemporada finalizada, el Real Madrid se prepara para la Supercopa de Europa contra el Atalanta, que se disputará el próximo miércoles 14 en Polonia. Ancelotti contará con todos sus efectivos, incluyendo a Mbappé y Bellingham, para intentar ganar el primer título de la temporada.

La gira en Estados Unidos dejó claro que, aunque el Madrid necesita ajustes, la base es sólida. En un año que puede ser el más largo de la historia, con siete títulos en juego, el Real Madrid podría culminar la temporada con la final del Mundial de Clubes de la FIFA el 13 de julio.