El Barça comienza el año con sonrojo ante el colista

El colista es el Espanyol, el partido es un derbi nocturno y helado en Cornellà-El Prat y en el banquillo rival se sienta por primera vez un salvavidas como el asturiano Abelardo, exjugador del Barça, además, entre 1994 y 2002. No hay espacio para la confianza ni para la relajación. El club blanquiazul se juega la vida y morderá como nunca.

Curiosamente, otro aviso para el Barça, ya que esta situación clasificatoria se ha repetido en dos ocasiones y en ninguna de ellas un Espanyol colista perdió ante un Barça líder. En la temporada 1963-64, concretamente en la jornada 14, 2-2 en feudo blanquiazul y en la 2008-09, jornada 20, 1-2 en el Camp Nou con dos goles de De la Peña y Pep Guardiola y Mauricio Pochettino en los banquillos.

El Barça tiene una importante baja, la del portero alemán Ter Stegen, quien venía jugando con una tendinopatia en la rodilla derecha de la que no quiere operarse por ahora, pero que le ha obligado a parar unos días para recibir tratamiento. Neto, el guardameta brasileño que llegó del Valencia en verano, está preparado. Curiosamente, se daba por segura su titularidad en la Supercopa de España y en el cada vez más próximo estreno azulgrana en la Copa dentro de las rotaciones lógicas de guardametas, por lo que ganará protagonismo tras un inicio de temporada en el que sólo tuvo minutos en Milán ante el Inter (1-2) con la clasificación para octavos de la Liga de Campeones asegurada.

Son bajas también los lesionados Arthur (tres semanas más en la enfermería por su pubalgia) y Dembélé, a quien le queda un mes más en el dique seco. Todibo y Wague fueron los descartes por decisión técnica. Sí entró Ansu Fati, con el alta médica tras un golpe en la cadera que sufrió ante el Madrid. El Espanyol no podrá contar con el sancionado Granero ni con los lesionados Corchia, Piatti y Víctor Sánchez. Matías Vargas es duda.

«No me parece una misión imposible ganar al Barça», afirmó Abelardo, mientras que Valverde, con pasado blanquiazul, reconoció: «Desde luego que me gustaría que siguieran en Primera, será un derbi muy complicado que hay que saber jugar».

El Barça sufre ante equipos grandes y también lo hizo ante el colista. Es su sino este año.

Primer borrón en el año que recién comienza y lo hace ante un equipo, el de Albelardo, que llegaba como colista y que hasta la fecha

Que el calendario haya mudado de hojas para dar la bienvenida a 2020 no ha supuesto cambio alguno en lo que el Barcelona plantea sobre el verde. Tampoco era de esperar que el libreto de Valverde cambiase cuando no lo ha hecho en tres años. Es evidente que se levanten más o menos títulos,

Porque más allá del resultado, de lo ocurrido antes y después del descanso, el Barcelona

El nuevo Espanyol de Abelardo salió con las ideas muy claras. Necesita andar antes de comenzar a correr y así salió metido atrás para esperar las embestidas del conjunto culé. Pero llegó a convertirse en el líder del choque tras marcar el primer gol en el primero de los remates que tiraba entre los tres palos defendidos por Neto.

Hasta que Messi y Luis Suárez con un disparo al palo hiciesen reaccionar a los suyos, el Espanyol, colista, se permitía el lujo incluso de

Por suerte para Valverde y, por ende, para el barcelonismo, el equipo cuenta con mucha pólvora arriba. Con jugadores capaces de desbloquear y enmendar una y otra vez la misma situación. En esta ocasión fue Luis Suárez. El uruguayo está tocado por la varita y se ve capaz no sólo de marcar si no de asistir cuando las circunstancias lo demandan.

Buscaba con ahínco el gol que le diera la calma necesaria, pero la

Finalmente, el gol llegó de lado del colista, en los minutos finales.