Un penalti salva al Levante en la prolongación

La Real no pudo lograr su primer triunfo a domicilio de la temporada y la igualada deja a ambos equipos con quince puntos y sin encontrar solución a sus respectivas dinámicas desfavorables.

El equipo donostiarra fue ligeramente superior en un primer tiempo bastante equilibrado, marcó pronto en la segunda parte y contuvo sin excesivos problemas a partir de entonces a su rival, pero no buscó ampliar la ventaja y el penalti del final le dejó sin premio ante un rival muy desorientado todo el encuentro.

El partido comenzó con poco ritmo. La Real Sociedad tenía más el balón, pero solo llegaba a la meta de Mariño en acciones a balón parado, mientras que el Levante se mostraba muy ordenado en defensa, pero apenas tenía salida.

Consecuencia de la dinámica de unos y otros fue la escasez de acciones de peligro. La Real conducía el balón hacia la meta rival con más frecuencia de lo que lo hacía el Levante , pero el resultado era el mismo: una gran falta de efectividad.

Por lo que al Levante respecta, las aproximaciones a la meta del conjunto donostiarra se producían casi siempre con pocos efectivos, lo que facilitaba el trabajo de la retaguardia rival, ya que la Real nunca desatendió esa zona, consciente de que a la contra podía llegar el peligro de su oponente.

A falta de profundidad, quedaban los balones parados. En esas acciones se concentraban las posibilidades de marcar de unos y otros, pero sobre todo del Levante , al que le faltaba mucho fútbol de creación.

Sin que la Real se animara a tener más presencia en ataque y sin que el Levante buscara jugar más cerca del área rival se llegó al descanso sin goles.

El segundo tiempo dio comienzo con el 0-1, marcado con la derecha por Canales al aprovechar un rechace tras una jugada elaborada por la banda que él mismo había iniciado.

Tras el gol de la Real , el Levante dispuso de dos opciones ante la meta rival más claras que las que había tenido en el primer tiempo, pero no consiguió adueñarse del partido con muestras claras de poder empatarlo.

Un cabezazo de Barral (m.61) fue la ocasión más clara del Levante hasta ese momento del partido. El balón dio en el larguero y no entró. Fueron unos minutos en los que el Levante tuvo algún destello, aunque mediado el segundo tiempo, la Real retomó el control del encuentro.

Cuando el encuentro entró en el último cuarto de hora, el técnico local, Lucas Alcaraz, arriesgó, sacó a Rubén por Nikos y su equipo atacó más, también porque la Real no tuvo más objetivo que hacer valer su ventaja, lo que parecía ser suficiente para sacar el encuentro adelante.

No lo fue y el Levante sumó un punto gracias a un penalti en el tiempo añadido que le sabe a mucho tras lo visto en el encuentro, de la misma forma que la Real se dejó dos puntos en Valencia.