Kendrick Perry, tras los pasos de Jorge Garbajosa y Tyson Carter

Avalaron su galardón individual 27 puntos, 6 asistencias y 2 rebotes, con un espectacular cuatro de seis en el lanzamiento de tres y el pleno en los nueve tiros libres que intentó. El base estadounidense, con nacionalidad montenegrina desde su paso por el Buducnost, es un auténtico trotamundos del baloncesto europeo al que su gran momento le llegó a los 32 años y en su tercera temporada en el Martín Carpena, donde ha encontrado la estabilidad que le faltaba para dar un paso adelante en su carrera.

Perry nació en 1992 en la pequeña localidad de Ocoee, en Florida, y se formó en los State Penguins de la Universidad de Youngstown, en Ohio. Tras no ser drafteado en 2014 probó fortuna lejos de la galáctica NBA. Pasó por los Sydney Kings, de Australia, antes de jugar en la liga de desarrollo de la NBA con los Iowa Energy. De ahí pasó a los exóticos baloncestos húngaro y normacedonio. Nizhny Novgorod, en Rusia; Levallois, en Francia; Cedevita Olimpija, en Eslovenia; Panathinaikos, en Grecia; y finalmente el Buducnost montenegrino formaron parte de una trayectoria deportiva de explosión tardía, la que propició su llegada al Unicaja en 2022.