Una última noche de música en La Malagueta llena de alegría

Yendo a lo importante, el público tenía muchas ganas de este sábado festivo y tan diferente entre la programación de la semana. María Peláe y Encarni Navarro fueron las másteres de la noche, una ola de felicidad musical que llegó con un 'fresquito' de terral; parece una paradoja, pero no hay otra explicación. Navarro entró al escenario resplandeciente, con las ganas a flor de piel para hacer disfrutar a su gente de Málaga. ¡Y cómo lo hizo! Es una artista de la canción y de las palabras, hasta llevarlas al humor con mucho sentimiento y respeto. Tanto fue así que le cantó al coronavirus, un rechazo para echarlo de nuestras vidas con la melodía de 'Vete' de Los Amaya: «Ese bichillo que está rondando hay que matarlo con cariño, con conciencia y con solidaridad con los que lo están pasando mal», comentó entre canción y canción. José Ramírez acudía encantado para disfrutar de la artista, afirmando que ya la había visto en alguna que otra ocasión en El Pimpi: «Es estupenda, te lo pasas genial cuando canta. Un día me sacó a bailar y todo, ¡qué vergüenza!», recuerda entre risas este joven periodista.

Algo preocupada por el tiempo que tenía para hacer de las suyas en escena, Encarni Navarro siguió su show con una sonrisa muy amplia y animando en todo momento a los asistentes, que aunque tenían que bailar y tocar palmas en el sitio, estuvieron bastante animados. Incluso bailaron una sevillana en las sillas, algo complicado de ejecutar, pero posible. ¿Por qué no?

La expectación por ver un directo de la ecléctica María Peláe era máxima. José Pozo y Cristian Muñoz estaban entre el público con 12 amigos más, deseando que le tocara el turno a la malagueña de la canción original y con mucho salero: «Ella es guapísima y, además, tiene un estilo muy distinto. Esperamos pasarlo bien y disfrutar mucho, es nuestro primer concierto después del confinamiento», contaron con ilusión.

El cambio de escenario se hizo rápido y muy ágil para que la noche siguiera marchando sobre ruedas, como cada día y con una puntualidad de oro.

Todos 'aliquindoi' hasta que la malagueña se personó en el centro del escenario para hacerlo suyo. «Nosotras la vimos el año pasado, fue telonera de Vanesa Martín. Aunque la conocíamos de antes, ese día nos enganchó y hemos estado siguiendo su carrera», cuentan Rocío Martínez y Miriam Vega.

Salió jaleando a su público, con un mantón estratégicamente colocado como top, homenaje a esa feria a la que hemos tenido que decirle 'hasta el año que viene'. Con su 'Remix Lola Flores, Residente y Rosalía»' se movió en el escenario con el coraje que le caracteriza mientras canta: «¡Cómo me las maravillaría yo!», exclamaba como Lola Flores en un tema casi sin un respiro.

Después de darlo todo y más en su primera aparición, cogió su guitarra y calmó un poco el tono. Pero sólo un poco, porque su intensidad engancha y mantener al público en lo alto durante todo el show es una tarea difícil, pero ella lo logra. Como contaba Lorena Moleón, «María es divertida y tiene un rollo diferente. Es la primera vez que la veo en directo». Se tuvo que llevar una sorpresa, porque Peláe tiene una fuerza monumental que asombra a quien nunca la ha visto sobre el escenario. Fue, sin duda, un broche muy flamenco a la última noche de música en la plaza de toros. ¡Hoy más, aunque diferente!