Málaga, posible puerta de entrada del homo sapiens a Europa en el Paleolítico

Así se concluye de la primera mesa redonda de las Conferencias de Otoño del Museo de la Ciudad de Antequera, que tienen como eje central el reciente hallazgo de esta cueva que no sólo introduce a Antequera en el mapa del Paleolítico, sino que la une a otros yacimientos del sur de Andalucía.

Así los arqueólogos Luis Efrén Fernández Rodríguez, de la Cueva de Nerja; Pedro Cantalejo de las Cuevas de Ardales y Rincón de la Victoria; y Manuel Romero, de Antequera, compartieron lo que puede significar el hallazgo de este nuevo yacimiento donde se relaciona a varios puntos malagueños con signos comunes en usos funerarios.

Si se fecha el yacimiento en torno a hace 45.000 años, se podría cambiar la teoría por la que se estima que el homo sapiens entró por el Este de Europa y terminó su asentamiento en estas tierras. Las investigaciones en Antequera expondrían que lo haría por Gibraltar y tendrían, por la hoy provincia de Málaga, su entrada, por lo que el sur de España sería la zona por la que entraron desde el norte de África y de ahí a toda Europa.

Pero cuando realicen las pruebas en los restos encontrados se podría incluso llegar a una fecha de hace 65.000 años, demostraría que el hombre de Neandertal ya era portador de un lenguaje simbólico y complejo, algo que no se concibe hasta la llegada del homo sapiens.

En diciembre se cumplirá un año de su hallazgo, cuando un grupo de senderistas encontraron restos humanos y de unas vasijas, poniéndolo en conocimiento del arqueólogo municipal, Manuel Romero. Cuando investigaron el lugar fecharon los restos en el Neolítico, que fueron enterrados en una cueva del Paleolítico.

Por otro lado, llama la atención en el yacimiento que el interior de la cueva está en el exterior. El motivo: la cantera que hubo en la zona cuando se construyó la carretera del Romeral hace un siglo, la que une Antequera con las Pedrizas, que se usaba antes de la construcción de la autovía Antequera-Málaga.

La zona ha sido frecuentada como escenario de rutas por la naturaleza, pero nadie se había fijado en el gran panel de estalactitas con pinturas rupestres, a pesar de ser utilizadas como peldaños para escalada de la gran roca que muestra la fotografía.

Tras descubrir la importancia del lugar, se llamó al equipo de investigación que dirige Hipólito Collado al frente del proyecto 'First Art', que une a expertos de España y Portugal donde participan los investigadores de Nerja y Ardales. «Hay formaciones como nubes que se pueden formar en un ambiente bajo el agua, en otros casos son coraloides y luego toda esta serie de láminas, estas cortinas donde hay estalactitas», explica Luis Efrén, de la Cueva de Nerja. Están en plano horizontal y no vertical, debido al desplome de parte de la cueva que giró 90 grados.

En grupos

Además de la antigüedad que está por certificar, lo que les ha llamado la atención es «una serie de signos, barras, que las tenemos bien representadas en la Cueva de Nerja, en Ardales, en Pecho Redondo, en Toro-Calamorro en Benalmádena. Observamos que hay una profusión de estos signos, de esta actividad simbólica-gráfica en todas las cuevas de la provincia».

Eran grupos del Paleolítico que «se iban moviendo por el espacio de la Costa al interior y del interior a la Costa. Estos grupos pintaron en la Vega de Antequera y muy posiblemente en la Bahía de Málaga, aprovechando unos recursos naturales próximos a las costas y playas, así como en las tierras del interior, en este caso en las zonas de la llanura del río Guadalhorce a su paso por Antequera, una zona rica en recursos cinegéticos y vegetales».

Aunque «hasta que no tengamos las pruebas correspondientes con uranio-torio y radio carbono, carbono 14 si es posible, sería un abanico entre 65.000 y 28.000 años», se puede cambiar la Prehistoria desde el sur de Andalucía a través de Málaga.