Diez años con el proyecto del Auditorio de Málaga en coma
La elección andaluza de los Latin Grammy evidencia el histórico déficit de infraestructuras para eventos en Málaga. La ciudad propone un Carpena 'al estilo Goya'. «Pero estamos en inferioridad de condiciones», admite el alcalde
«Que necesitamos el Auditorio es obvio». Lo dijo este jueves el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, pero la misma frase la pueden ... encontrar en la hemeroteca de hace cinco, diez o quince años atrás. Nada ha cambiado. Justo una década después de que se disolviera el consorcio de administraciones que iba a levantar la infraestructura con el proyecto de ejecución ya terminado, el futuro Auditorio sigue en estado de coma sin indicios de que vaya a despertar. Y mientras duerme, podemos soñar con los Latin Grammy en Málaga, pero sabiendo que es casi un imposible. «El problema es que no tenemos Auditorio», añadió el alcalde. Obvio.
Málaga, apunta De la Torre, propondrá a la Academia Latina de la Grabación el Martín Carpena 'al estilo Goya' para la gran fiesta de la música hispanoamericana. «Intentaremos conseguir los Latin Grammy, pero estamos en inferioridad de condiciones. Solo tenemos el Carpena habilitado como en los Premios Goya. Lo plantearemos por si llegamos a tiempo». Casi 800.000 euros costó en 2020 transformar el Palacio de los Deportes en un elegante auditorio de eventos -aunque con sillas de plástico en vez de butacas- para la noche del cine español. Era la única manera de convocar en Málaga a 3.000 personas sentadas bajo un mismo techo. Las mismas que sin metamorfosis previa entran en el mayor auditorio del Fibes, el Palacio de Ferias y Congresos de Sevilla. Y contra eso no se puede competir.
Pero el Auditorio de la Música sigue durmiendo en los laureles de la falta de voluntad política. Primero, la crisis económica dio por finiquitado en 2013 el consorcio que vinculaba a Ministerio, Ayuntamiento y Junta al proyecto tras haber invertido en todo el proceso casi cinco millones de euros y varios años de vida. Después, el covid frenó en seco la inversión privada que venía a salvarlo. Y ahora el silencio. Ninguna administración se pronuncia -de momento- sobre esta carencia histórica de Málaga. Parece que solo el alcalde, preguntado por este periódico, mantiene viva la esperanza de la reanimación: la elección de Málaga como la ciudad que acoja la Expo 2027 «sería la oportunidad» de resucitarlo. «Va a haber muchos congresos y convenciones y el auditorio serviría para ello». Antes de eso, habría que buscar la fórmula de «despejar» los terrenos propiedad de la Autoridad Portuaria que ahora dan un servicio logístico al Puerto. Y tampoco eso es tarea fácil ni barata.
Pero ojo, el Auditorio proyectado en San Andrés tampoco sería aquí la solución: la sala principal alcanzaba las 1.900 personas. No hay que olvidar que ese recinto cultural se concibió como escenario para la lírica y la sinfónica, con unas condiciones acústicas muy específicas que garantizaran la máxima calidad del sonido; algo innecesario en el caso de un evento, por muy grande y musical que sea. Quizás el debate ya no esté solo en la necesidad de un Palacio de la Música para que la Orquesta Filarmónica y la ópera puedan mostrar todo su potencial en una ciudad que se jacta de cultural (que también), sino en la reclamada ampliación del Palacio de Ferias y Congresos de Málaga, donde ahora no caben más de 900 personas en las butacas. Y, mientras tanto, los Latin Grammy miran a Sevilla. Obvio.
En esta información ha colaborado Pilar R. Quirós
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