Los Torrestrella dejan dos heridos graves

Y este año, las previsiones se cumplieron. Dos corredores resultaron heridos graves y un tercero resultó herido por asta de toro. Según el parte médico, el corredor A. G. O., de 34 años y vecino de Deba (Guipúzcoa), quedó ingresado en el hospital en estado grave por contusión torácica con hemoneumotorax izquierdo, con múltiples fracturas costales sufridas en la calle Estafeta. También quedó ingresado en el hospital en estado grave V. O. M., de 55 años y vecino de la localidad valenciana de Vinalesa, con fractura de la meseta tibial izquierda y fractura del peroné derecho, sufridas en Mercaderes.

El único herido por asta de toro del encierro, M. J. B., de 52 años y vecino de la localidad navarra de Cascante, permanece ingresado en estado menos grave por herida en región perineal de seis centímetros de longitud, sin afectación visceral ni neuro-vascular relevante Otros dos corredores fueron trasladados con un traumatismo leve y con una fractura vertebral.

El encierro, muy rápido, duró sólo 2 minutos y 25 segundos, aunque tuvo el peligro de que la manada se disgregó a partir de la curva de Estafeta. Al ser lunes, no había un excesivo agobio de corredores, lo que permitió ver bonitas carreras en Estafeta, dentro de lo que permitía la velocidad de los astados. La intensa lluvia que cayó el domingo en la capital navarra también pudo desanimar a un buen número de corredores, que tal vez prefieran esperar a los siguientes encierros, donde todo apunta que la climatología será más benigna.

Dos partes

La carrera tuvo dos partes. Una primera donde los toros corrieron todos hermanados y una segunda, a partir de la curva de la Estafeta donde se han disgregado en tres grupos, aunque los astados mostraron su nobleza y no derrotaron hacia los corredores a pesar de que al comienzo de la calle uno de los toros cayó sobre un grupo de mozos, creando momentos de tensión. Afortunadamente continuó su camino algunos metros por detrás del resto.

Una de las curiosidades más llamativas de este primer encierro fue que tan sólo corrieron cinco toros, en vez de seis, ya que uno de los astados se lesionó en la noche del lunes cuando realizaban el 'encierrillo', que es el traslado a la carrera y en soledad de los toros entre los corrales del gas, donde descansan habitualmente hasta los corralillos de Santo Domingo, donde pasan la última noche antes del encierro. Esta circunstancia, junto a que dos de los toros podían ser confundidos con cabestros provocó que numerosos mozos se confundieran a la hora de saber si habían pasado ya todos los toros.

En definitiva, los encierros de San Fermín de este año 2014 se estrenaron con todos los ingredientes que ofrecen estas carreras, peligro, emoción, heridos por asta de toro, y cuatro traslados a los centros hospitalarios, afortunadamente en principio ninguno de excesiva gravedad.