¿Cuál es la música que marca el día a día de los universitarios?

Alba Gómez (2002, Estepona) de Filología, confesó tener un gusto musical bastante variado. Aunque prefiere el pop, tanto internacional, como Taylor Swift, como español o incluso K-pop, también disfruta de música urbana y clásica. «Si voy al gimnasio, me pondré reguetón seguramente más que música clásica que suelo escuchar cuando leo o estudio», expresó. Gómez destacó el gran repertorio de estilos disponibles en la actualidad, pero reconoció no conectar tanto con estilos como el rock o la electrónica.

Por su parte, Paula Pascual (2002, Burgos) también de Filología, se decantó por el pop español y el indie, mencionando artistas como La Oreja de Van Gogh, Judeline o Carolina Durante. «El pop español nos ha marcado como generación, ha sido la banda sonora de muchas de las etapas de nuestras vidas», comentó. Sin embargo, admitió que, al igual que Gómez, el rock no era lo suyo, y que la música clásica tampoco aparecía en su 'playlist'. «No suenan tanto en las redes sociales y son menos comerciales, por lo que nos llegan menos a los oyentes», manifestó.

No todos los universitarios siguen las corrientes mayoritarias, Amine Rahaoui (1999, Milán) estudiante de Máster, se declaró como «un apasionado del techno y el hardtechno». «Me pone la piel de gallina y me hace sentir cosas que otro tipo de música no lo hace», señaló. A pesar de 'su pasión', aceptó que no son géneros que atraigan al público general, pero sostuvo que la música electrónica sigue teniendo una audiencia considerable. Para Rahaoui, en cambio, el género clásico es 'cosa del pasado'.

Aida Zamora (2002, Lucena), de Traducción e Interpretación, prefiere géneros como el dancehall, el reguetón y el urbano. Su interés va más allá del entretenimiento: «Me gusta estar actualizada en el panorama musical, sobre todo en el urbano de España», reveló, mencionando artistas como Judeline, Cruz Cafuné y Rels B.

Sin embargo, Zamora opinó que este estilo no es el más predominante: «Es un género conocido, pero tampoco tiene tantos seguidores como otros, por ejemplo el reguetón». Para ella, géneros como el heavy metal están fuera de su radar, ya que no le transmiten ningún tipo de emoción ni conexión.

Si algo comparten los jóvenes, independientemente de sus gustos, es la presencia constante de la música en su día a día. Desde el coche hasta el gimnasio, en las tareas domésticas, las clases o momentos de introspección, los auriculares y altavoces se convierten en herramientas esenciales para acompañarlos. «Siempre llevo música conmigo», asegura Gómez, un sentimiento que comparten Pascual y Rahaoui.

La música continúa siendo un reflejo de la diversidad y complejidad de los universitarios, un elemento que les une y les diferencia al mismo tiempo. Cada canción elegida no solo acompaña su rutina, sino que también cuenta un poco de su historia.