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Aún están en marcha obras en zonas muy emblemáticas de Benalmádena. En el Pueblo, continúan los trabajos en el casco histórico, en el entorno de ... la plaza de la Niña, donde se renuevan canalizaciones y se embellecen y unifican las solerías. En Arroyo de la Miel las obras de toda la zona de Gamonal encaran su recta final enmarcadas en uno de los proyectos más ambiciosos del municipio, con un presupuesto de 2,6 millones de euros para renovar un barrio con un gran tránsito tanto de residentes como de turistas.
Mientras esas avanzan, en el Ayuntamiento planifican ya la remodelación de otra zona clave en la localidad, en pleno centro de Arroyo de la Miel. En concreto trabaja en un proyecto que supondrá un cambio de imagen en el entorno entre el centro de salud y la estación de tren de Cercanías. Es uno de los proyectos que el municipio ha presentado a la nueva convocatoria de fondos europeos para poder conseguir fondos.
En concreto afectará a la calle Mercurio, a las aceras que rodean el centro de salud y a las calles del Nacimiento y Orión. «Estamos trabajando para sacarlo a licitación por más de 730.000 euros. Es un proyecto que pondrá en valor la actividad del Centro Comercial Abierto de Arroyo de la Miel con la mejora y ampliación de la accesibilidad de los itinerarios peatonales y la renovación total del pavimiento y las aceras», defendió recientemente el alcalde de Benalmádena, Juan Antonio Lara, a través de sus redes sociales.
La idea, tal y como da a entender el alcalde, es dar protagonismo al peatón y favorecer su tránsito en una de las zonas de más trasiego del municipio. «Se van a renovar las instalaciones y la solería de todas las calles y además en la calle Mercurio (la que sube desde el centro de salud hacia la explanada de Tivoli) se construirá una acera a nivel en el lado izquierdo, donde ahora hay aparcamientos, para ampliar la zona peatonal», explica el concejal de Obras, José Luis Bergillos,
Dentro de ese proyecto se ha contemplado también una mejora de la fachada de la estación de tren, pero este punto aún está en una fase inicial, ya que necesita autorización del Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (Adif), una empresa pública que depende del Ministerio de Transportes.
De todas formas, el proyecto en sí también necesita el visto bueno de Adif porque la intervención afectaría a ciertas zonas que están en el entorno de influencia de la empresa pública. En concreto, según señala Bergillos, se tocaría el talud y las pérgolas que hay en la plaza Adolfo Suarez. De ahí que aún no haya fecha prevista para el inicio de las obras, «ahora la pelota está en el tejado de Adif».
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