Borrar
El alcalde de Torremolinos, José Ortiz, ha sido uno de los más vehementes en sus críticas SUR
Los alcaldes socialistas de la Costa exigen a la Junta que rectifique y que sus municipios pasen al nivel 2

Los alcaldes socialistas de la Costa exigen a la Junta que rectifique y que sus municipios pasen al nivel 2

Víctor Navas, José Ortiz y Josele González consideran que se está perjudicando directamente a sus economías locales

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Viernes, 5 de marzo 2021, 18:58

Necesitas ser suscriptor para acceder a esta funcionalidad.

Compartir

La relajación de las medidas restrictivas por la Covid-19 que –entre otras cosas– permite abrir la hostelería y el comercio hasta las 21.30 no ha llegado a los municipios de la Costa del Sol porque aún no están en el nivel 2 de alerta; un hecho que ha provocado que los alcaldes del PSOE de los principales municipios (Benalmádena, Mijas y Torremolinos) hayan exigido una rectificación a la Junta de Andalucía.

El más vehemente de los tres ha sido el primer edil de Torremolinos, José Ortiz, que sostiene que la incidencia superior de otros municipios de la Costa del Sol no debería afectar de esta forma a la economía de su municipio. «El comercio y la hostelería de Torremolinos vienen demostrando ser un sector ejemplar y han contribuido con ello a que nuestra ciudad haya tenido tasas de incidencias menores al resto de municipios de nuestro entorno durante toda la pandemia», argumentó el máximo responsable municipal

Así, defiende que con una incidencia acumulada de 72 casos por cada 100.000 habitantes, Torremolinos presenta unos datos que le permitirían abrir sus establecimientos hosteleros hasta las 21.30 horas y ampliar el horario del tejido empresarial. Sin embargo, al aplicarse el criterio de incidencia por distritos sanitarios, Torremolinos se sitúa en el nivel 3 de alerta ya que algunos municipios del distrito Costa del Sol se mantienen con valores superiores a los de la localidad.

Desde el gobierno local argumentan que el distrito Costa del Sol, que aglutina los municipios de la costa occidental de la provincia, ha mantenido desde el inicio de la tercera ola «valores muy dispares entre las localidades que la componen», pero las medidas restrictivas y cierres perimetrales se han realizado semanalmente según la situación de cada municipio, una estrategia que el alcalde ha señalado como acertada durante estas semanas atrás, y que se ha aplicado en toda la región. «Los vecinos han cumplido con las normas sanitarias durante toda la pandemia y el tejido empresarial, comercial y hostelero de nuestra ciudad ha tomado las medidas necesarias siempre que se les ha pedido. No podemos consentir este castigo a nuestro comercio y nuestra hostelería», critica.

En el municipio vecino, Benalmádena, la reacción ha sido similar. El alcalde, Víctor Navas –también del PSOE– dijo sentirse «decepcionado» y no entender los «cambios de criterio» por parte de la Junta de Andalucía, ya que Benalmádena –con una incidencia acumulada hoy 5 de marzo de 81 casos por cada 100.000 habitantes– es menor que otras ciudades del entorno. «Nos vemos obligados a permanecer una semana más en el nivel 3, mientras otras pasan al 2 con peores cifras que las nuestras», señaló Navas, que sostiene que esto no es un hecho baladí. «Permanecer una semana más en la fase 3 implica que nuestros comerciantes se vean obligados a cerrar a las 18.00 horas cuando la ciudad ya cumple con todos los requisitos para ampliar su horario comercial hasta las 21.30», denuncia el regidor.

«Es un sinsentido: cuando interesa se tienen en cuenta los datos del municipio; y cuando no, los del distrito sanitario, lo que provoca que Benalmádena tenga que adoptar las mismas medidas restrictivas que Marbella o Estepona, localidades con una mayor incidencia del virus actualmente», insistió.

Ese es el mismo argumento utilizado por el alcalde de Mijas, Josele González, que cree que este sistema perjudica a municipios de la Costa como Mijas, que se ven «arrastrados» por altos índices de contagios de otras ciudades como Marbella. «Es un hecho que además genera efecto llamada y puede provocar aglomeraciones en la capital», argumenta.

Mientras que desde Estepona y Marbella no se han pronunciado al respecto, desde Fuengirola señalan que el deseo sería abrir cuantas más horas mejor, pero que para eso están trabajando todos los días. «Para que eso ocurra cuanto antes, no queda otra que ajustarnos a las directrices determinadas por las autoridades sanitarias, que están basadas en criterios técnicos y buscan garantizar la salud de todo», añaden.

A pesar de las críticas, el consejero de la Presidencia, Elías Bendodo, ha asegurado hoy que entiende la preocupación de los alcaldes, pero son los criterios sanitarios los que priman. «Estoy convencido de que si la evolución es buena la semana que viene podrán pasar al nivel 2», anunció.

Reporta un error en esta noticia

* Campos obligatorios