Un guarda rural de Frigiliana libera a una cría de macho montés que había caído en un lazo instalado por un cazador furtivo
Julio Fernández consiguió localizar al animal tras el aviso de un monitor deportivo y de unos vecinos
«El animal tuvo la suerte de romper el tronco en el que estaba puesto el lazo, si no lo hubiera hecho, habría muerto», asegura ... Julio Fernández quitándose el mérito de haberle salvado la vida a una cría de cabra montés macho, el pasado lunes en Frigiliana. Tal y como hace desde hace ahora casi un año, este guarda rural, contratado por el Ayuntamiento, junto a Manuel Lorenzo, estaba patrullando ese día por el pueblo axárquico cuando fue avisado por la Policía Local de que unos vecinos y un monitor deportivo habían detectado que un joven ejemplar macho de esta especie estaba atrapado en un lazo, instalado presumiblemente por un cazador furtivo, un arte totalmente prohibido.
Sin pensárselo dos veces, acudieron a la zona, un enclave escarpado junto al polideportivo La Horca, próximo al cauce del río Higuerón, y comenzaron a buscarlo. «El primero que se acercó fue un policía local, Damián Prados, pero el animal se asustó y salió corriendo. No quise dejarlo así y continué bajando por el barranco, hasta que di con él», explicó Fernández, de 34 años y que antes de este puesto había trabajado como cabrero. «Con mucho cuidado lo solté del lazo, y al momento el animal salió corriendo y saltando, a encontrarse con la madre, que estaba en la ladera de enfrente, los vecinos me dijeron que llevaban toda la noche escuchándola silbar«, detalló.
Según explicó, este tipo de artes de caza, al igual que los cepos, están «terminantemente prohibidos». «Es un peligro no sólo para los animales salvajes, sino para cualquier perro o incluso para algún niño que pueda meterse por allí. Estos lazos hacen un nudo que aprieta más conforme te mueves, el animal tuvo la suerte de que el tronco de pino al que estaba sujeto se partió y se lo llevó arrastrando», manifestó el guarda rural, una figura administrativa contemplada en la legislación de seguridad nacional e impulsada por el Consistorio frigilianense hace hace un año. «Creo que somos los únicos guardas rurales en la provincia, en otras zonas como Sevilla también hay muchos pueblos que lo tienen«, detalló.
Coordinados con la Policía Local y la Guardia Civil
Entre las actuaciones en las que han participado Fernández y Lorenzo a lo largo de este año destacan el rescate de una pareja de senderistas perdidos en la Sierra Almijara, la colaboración en la identificación de un supuesto ladrón de balanzas de camiones, que acumulaba más de 60 delitos, así como otros grupos de ladrones que asaltaban viviendas rurales. «Estamos coordinados con la Policía Local y la Guardia Civil y trabajamos bajo sus órdenes», explicó Fernández.
De hecho, tras localizar el lazo furtivo, el guarda rural dio aviso al Seprona de la Guardia Civil y a los agentes de Medio Ambiente de la Junta de Andalucía. «A ver si con la colaboración de los vecinos conseguimos dar con la persona que puso este lazo, porque este tipo de técnicas de caza no se pueden permitir, están prohibidas y son muy peligrosas«, afirmó Fernández. Según explicó, en esta zona del parque natural »no hay mucha caza furtiva, porque los que tienen permisos de armas pueden matar jabalíes, ya que hay muchos, y con eso se quitan las ganas«, apostilló. Sobre el destino de la joven cabra montés, en caso de que hubiera muerto, Fernández cree que el cazador »se la habría comido«. »Es una barbaridad, ¿es que no tienen carne en las carnicerías?«, expresó.
¿Tienes una suscripción? Inicia sesión