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EUGENIO CABEZAS
Domingo, 14 de mayo 2017, 00:53
La tradicional romería de San Isidro, patrón de los agricultores, que tendrá lugar mañana y que se viene celebrando, de manera ininterrumpida, desde el año 1984 en el entorno de los jardines que rodean a la Cueva de Nerja, podría ser la última que se celebre en este emblemático enclave de la localidad más oriental de la provincia.
¿El motivo? La Fundación que gestiona el principal monumento natural de la provincia, declarado Bien de Interés Cultural (BIC), con la categoría de Zona Arqueológica, ha pedido al Ayuntamiento nerjeño que se busque una ubicación alternativa a una celebración que llega a congregar, cada 15 de mayo, a más de diez mil personas en el entorno, tanto en la víspera de hoy como durante todo el día, con una decena de barras y música en directo. El objetivo es no seguir poniendo en peligro el lugar, en cuyas inmediaciones, desde hace tres años, hay construido y pendiente de inaugurarse un jardín botánico, de 26.000 metros cuadrados, en el que la Junta ha invertido tres millones de euros.
El gerente de la Fundación, Carlos García, aseguró a SUR que con anterioridad a su llegada al cargo, el pasado marzo, ya se trató este asunto en una Junta Plenaria, «y hay acuerdo con el Ayuntamiento, que forma parte de la Fundación con la vicepresidencia que ostenta la alcaldesa, Rosa Arrabal (PSOE), en que hay que buscar otra ubicación para la romería de San Isidro en 2018». «Tenemos que ser cuidadosos con nuestro patrimonio declarado como BIC», aseguró.
García recordó que, en esta misma línea, en la programación de la 58.º edición del Festival Internacional de Música y Danza de la Cueva, que tendrá lugar del 10 de junio al 1 de julio, únicamente se ha incluido un espectáculo en el interior de la cavidad, el del tenor José Bros el próximo día 25 de junio. «Tenemos el enorme reto de presentar la candidatura de la Cueva a Patrimonio de la Humanidad de la Unesco, y el instituto de investigación, formado por científicos muy cualificados, nos aconsejan reducir al máximo los impactos al monumento, dentro y en el exterior», agregó.
Por su parte, la concejala de Tradiciones Populares, Patricia Gutiérrez (PSOE), reconoció que aunque en un primer momento recibieron la petición «con sorpresa», han acordado buscar una ubicación alternativa. «El anterior gerente, Ángel Ruiz, envió una carta a la alcaldesa aludiendo a una recomendación de la conservadora del jardín botánico», explicó la edil, quien detalló que la ubicación alternativa que están barajando con más fuerza es la del Cerro de Los Cancharrales o de San Isidro, situado en mitad de la vega de Nerja, a un kilómetro. «Queremos contar con la opinión de los vecinos y de la comunidad de regantes de San Isidro», dijo.
Sin barras para los partidos
Precisamente, en esta ubicación, donde aún se conserva la ermita original, aunque sin ninguna imagen en su interior, fue donde se empezó a celebrar la romería, en 1966, según destacó el historiador local Francisco Capilla. «Estamos estudiando las posibilidades que hay, tanto por la titularidad de los terrenos como por cuestiones de seguridad y suministros», dijo Gutiérrez. La romería de San Isidro en la Cueva cuenta con una decena de barras, música en directo y casetas para los partidos políticos.
Este año, sin embargo, no habrá barras de las formaciones locales, ya que en este emplazamiento se ha instalado ya el escenario en el que tendrán lugar tres de las actuaciones del próximo Festival de la Cueva.
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