Formación agrícola para devolver la libertad
Fundación Prolibertas ·
La entidad social forma parte del proceso de inclusión de personas migrantes y reclusos: «Hay prejuicios sociales y desconocimiento de su realidad»
En Fundación Prolibertas se enfrentan a los prejuicios. «Hay muchas personas que llevan cargada una mochila por los años que han pasado apartados de la ... sociedad», apunta la delegada de la entidad social en Málaga, María Soriano. Ella lidera el trabajo desde la sede de Antequera, donde trabajan con reclusos, exreclusos, personas sin hogar o colectivos con situación en riesgo de exclusión social. Es por eso que llevan a cabo la cobertura de sus necesidades básicas con recursos de acogida, programas individualizados de intervención y formación y empleo como factores esenciales para lograr la autonomía plena de las personas con las que trabajan.
«Hay muchos prejuicios sociales, falta de información, desconocimiento de la realidad y problemáticas graves en la cárcel o con los migrantes», defiende María Soriano. Los usuarios que atienden no suelen tener apoyos familiares o un círculo recomendable para su desarrollo y ellos les ofrecen las herramientas necesarias para poder salir de esa situación. Cuentan con un centro de acogida con 24 plazas, mitad dedicadas a personas privadas de libertad y las otras doce a migrantes. «También trabajamos en barriadas en riesgo de exclusión y abrimos nuestros programas de formación para los ciudadanos que necesiten ese aprendizaje para avanzar en su situación laboral», añade la delegada de Fundación Prolibertas.
Dentro de esa formación, se centran en la demanda de la comarca de Antequera: agricultura, logística y hostelería. «Son los tres grandes campos en los que más oportunidades encontramos. Contamos con convenios con empresas de la provincia para poder desarrollar las prácticas profesionales y la verdad es que siempre tenemos un buen número de personas que consiguen su oportunidad gracias a estos cursos. Acabamos de terminar la 'Escuela de Capacitación y Emprendimiento Hostelero', hemos empezado con 'Logística y Almacén' y tenemos previsto empezar en septiembre con la 'Escuela de Captación en Actividades Agrarias'» explica. Este último proyecto ha recibido el impulso de Fundación 'la Caixa' dentro de la Convocatoria de Proyectos Sociales.
En él, además de la formación teórico-práctica en el sector, se atienden aspectos formativos de interés como el mantenimiento de instalaciones o acciones respetuosas con el medioambiente. «Todo desde una perspectiva de género e intercultural transversalizada durante todo el itinerario personalizado de inserción de los participantes», aclaran desde Fundación Prolibertas. «Pueden acceder tanto personas acogidas en nuestro centro como cualquier persona externa; de este tipo tuvimos el año pasado a unos 170 usuarios dentro de los itinerarios de creación de empleo», detalla la delegada María Soriano.
Con las mujeres
El último proyecto de Prolibertas en Málaga se vuelca de lleno con las mujeres: la Casa Libertad Jacaranda. Esta iniciativa consiste en un centro de acogida destinado a acompañar a mujeres que están en proceso de reconstrucción vital y reintegración social. Con el acompañamiento personal, la formación, acceso a vivienda y empleo y defensa de los derechos humanos, esta casa de acogida se une a las ya establecidas por la fundación en Antequera, Córdoba o Algeciras.
«Tenemos ocho plazas y todas están dedicadas a mujeres con las que trabajamos en los centros penitenciarios y que, cuando salen de ellos, no cuentan con ningún recurso ni apoyo para poder construir una nueva vida», apunta María Soriano. Con este nuevo proyecto, Fundación Prolibertas sigue avanzando en Málaga para favorecer la situación de personas en riesgo de pobreza y exclusión social
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