El grupo Obsido invierte doce millones en comprar dos hoteles en la Costa del Sol

La operación, con una inversión de 12 millones de euros, incluye además de la adquisición, la reforma de ambos establecimientos, en los que trabaja un total de 39 personas que conservarán sus puestos.

Los establecimientos, vinculados ambos a la antigua propiedad del hotel Torrequebrada, se encontraban en concurso de acreedores y con una situación que ponía en serio peligro su supervivencia en el mercado.

Modernización

La intención del grupo, encabezado por el noruego Hakan Tollefsen y el español Joaquín Hinojosa, es modernizar ambos hoteles con unas obras que comenzarán antes de fin de año y que se irán ejecutando por partes para que haya continuidad en el funcionamiento. Actualmente, según explicó Hinojosa, la empresa está en la etapa de estudiar presupuestos, aunque la intención de sus responsables es dar inicio a las obras cuanto antes, incluso en el presente mes.

Aunque ambos aparthoteles explotan apartamentos turísticos, se trata de establecimientos de perfil diferente. El establecimiento de Estepona, con 90 habitaciones, es eminentemente vacacional y de playa, mientras que el de Marbella, con 56, situado en el centro de la ciudad, es un establecimiento urbano orientado a viajes de negocios durante todo el año y con un perfil más turístico en verano, ya que se encuentra a solo 300 metros del paseo marítimo.

El directivo Juan Castro, que estará al frente de la división hotelera del grupo, explicó que ambos establecimientos explotarán tanto el mercado nacional como los extranjeros y que además del segmento de alojamiento tendrán capacidad para actuar en el de eventos. En ese sentido, explicó que aunque los establecimientos son de tres estrellas, las obras previstas permitirán mejorar sus servicios y situarlos al nivel de establecimientos de categoría superior.

«Creemos en la Costa del Sol y queremos crecer aquí a gran escala», aseguró Tollefsen, quien adelantó que el grupo está mirando otras oportunidades en la zona.

Obsido forma parte de un conglomerado internacional instalado en 14 países y con intereses tanto en el desarrollo inmobiliario como en la gestión hotelera. En ese sentido, explicó que las nuevas unidades de negocio que se incorporen al grupo no provendrán exclusivamente de compras, ya que también existe la posibilidad de hacerse cargo de la gestión de establecimientos ya abiertos.

En la división inmobiliaria, el grupo ha desembarcado en la Costa del Sol con la intención de tomar posiciones en un momento como el actual donde los precios han experimentado un fuerte retroceso y por lo tanto el mercado ofrece interesantes oportunidades que pueden ser aprovechadas.