Rivera: «Rajoy, Bárcenas o Barberá no pueden liderar una era de regeneración»

En declaraciones a Catalunya Ràdio, Rivera ha admitido su parte de responsabilidad en el "fracaso colectivo" de no haber evitado las elecciones, aunque ha recordado que C's y PSOE "intentaron poner en marcha la legislatura con un acuerdo transversal y de políticas valientes, pero Mariano Rajoy y Pablo Iglesias la bloquearon".

Sobre si dará apoyo a Mariano Rajoy si el PP gana las elecciones en junio, Rivera ha dicho que "no se lo imagina", ya que si bien el problema "no es solo Rajoy, Rajoy es parte del problema. No es un problema personal del señor Rajoy, es toda una etapa política de falta de ambición, de falta de reformas y de corrupción", ha dicho.

"España ha de cambiar su política y regenerar el país. No creo que Rita Barberá, Bárcenas, Rajoy o el alcalde de Granada puedan encabezar la nueva etapa de regeneración", ha añadido "convencido" de que "hay gente válida en PSOE y PP con la que podemos hablar y ponernos de acuerdo para poner en marcha una nueva etapa". A su juicio, "no habrá nueva etapa si no somos capaces de ofrecer un nuevo Gobierno con un nuevo equipo y nueva gente que pueda ilusionar, o como mínimo ser respetada por el conjunto de la clase media española", ha aseverado Rivera.

Un futuro sin vetos

En este sentido, ha afirmado que "nadie puede pensar que una nueva etapa la encabezará quien ha tenido mayoría absoluta y no ha hecho estas reformas, o quien ha podido tomar medidas en su partido y no lo ha hecho", ha apuntado el líder de la formación naranja.

Aún así, ha dejado claro que "el futuro no pasa por vetos a nadie ni decir que no hablaré ni pactaré con ningún partido", por lo que "el sectarismo no será la fórmula de trabajo en los próximos años, que requieren cintura, diálogo y capacidad de llegar a acuerdos".

Es por ello que ha asegurado que Ciudadanos "no reniega" del acuerdo con el PSOE ni de "hablar con todo el mundo e intentar poner en marcha el país", aunque "eso no significa que (el acuerdo) siga vigente", ha apuntado. "Pero no reniego de sentarme en una mesa y llegar a un acuerdo".