Manuel Azuaga: un hombre de letras entre números

De su mano fue escalando por diferentes puestos de responsabilidad, como la subdirección y la secretaría general. Y quizá su llegada a la cúspide se habría producido antes de no haber pedido una excedencia en la caja tras recibir una llamada de Magdalena Álvarez en 2004. La ex ministra malagueña de Fomento se llevó a Azuaga a Madrid, le integró en su más estrecho círculo de colaboradores y le nombró presidente ejecutivo de Aena, cargo que ocupó hasta 2008, un año antes de que la propia Álvarez dejara su cartera ministerial.

De vuelta en Málaga, Manuel Azuaga retomó su carrera profesional en Unicaja como director de su División de Participadas. En seguida Medel tiró de él, confiándole en 2010 una delicada misión: coordinar el proceso de fusión con CajaSur. Él se encargaba de supervisar la operativa diaria de la entidad cordobesa y de terciar con sus responsables, lo que le granjeó más de un momento tenso. De hecho, llegó a apartarse temporalmente sus funciones en protesta por la actitud desafiante del Cabildo. Tras el fracaso de la operación, el presidente de Unicaja ratificó su confianza en Azuaga nombrándole su número dos.