Jerónimo encuentra a sus dos apoyos

Jerónimo González es uno de los más de 7.000 corredores que el pasado domingo corrieron la Media Maratón de Málaga. Este malagueño de 19 años se encontraba fuerte y estaba cerca de terminar los 21 kilómetros por debajo de la hora y media. Pero cuando llegó al entorno del estadio de atletismo Ciudad de Málaga, a apenas 500 metros de la meta, una bajada de azúcar le jugó una mala pasada y se desvaneció. Pese al percance, el corredor quiso entrar en meta por su propio pie y para eso contó con la ayuda de dos corredores anónimos que lo cogieron en brazos y le acompañaron hasta la misma línea de meta. Al final, Jerónimo, que participó con el club de corredores La Caña, hizo un tiempo de 1:32, mientras que sus padres, en la grada, se llevaron un susto al ver a su hijo entrar con ayuda.

La familia de 'Jero' quiso al día siguiente localizar a esos dos 'runners' anónimos. Una foto que realizó un fotógrafo de SUR a la llegada del joven era su única pista. Y la noticia que publicó la edición digital de este periódico para tratar de localizar a los dos corredores les puso en bandeja los nombres, con ayuda también de la organización de la carrera y a través de los dorsales.

'Jero' reconoce que no esperaba que su caso tuviese tanta repercusión. Recibió decenas de llamadas y mensajes a través de las redes sociales. La foto tuvo un gran impacto en las redes sociales como imagen del compañerismo y dela colaboración que hay en el mundo del atletismo, algo que no ocurre en todos los deportes.

El atleta malagueño explicó ayer a este periódico que ya ha conseguido contactar con los dos corredores de la foto (uno de Málaga y otro de Cádiz): Miguel Ángel Díaz y José García. «Solamente les he dado las gracias y ya quiero cerrar esta historia. Quizás me equivoqué al no parar, pero de todo se aprende», asegura. Por su parte, uno de los corredores, Miguel Ángel Díaz, también mandó un mensaje a SUR: «Nunca imaginé la repercusión que podía tener un gesto que considero normal entre atletas que no compiten mas que con si mismo. Siempre podemos dejar nuestra mejor marca para el domingo siguiente». Por suerte, todo ha quedado en una curiosa anécdota. Los implicados, como buenos 'runners', ya están pensando en su próximo desafío.