El Príncipe de Asturias visita por sorpresa a las tropas españolas destacadas en Afganistán

Don Felipe llegó esta mañana por sorpresa a la localidad afgana de Qala-E-Now en una visita sorpresa para conocer cómo es la vida de los 726 militares españoles que colaboran en la seguridad y reconstrucción del cuarto país más pobre del mundo. "A todos nosotros nos hacéis sentirnos orgullosos de nuestras Fuerzas Armadas y de ser españoles. Quiero que sepáis que, como Príncipe heredero, como heredero de la Corona y como militar, me siento hoy más que nunca muy unido a vosotros".

El heredero de la Corona española, que ya estuvo en Mostar (Bosnia) e Istok (Kosovo) en el 2002, ha permanecido apenas una hora en Qala-E-Now con los 220 militares del Equipo de Reconstrucción Provincial (TRT) de la Fuerza Internacional de Asistencia para la Seguridad de Afganistán (ISAF) antes de trasladarse a Herat para conocer la base de Camp Arena, donde estuvo el Rey Don Juan Carlos el pasado 31 de diciembre.

Con chaleco antibalas y casco

A su llegada a Afganistán, primeramente a la base de Qala-E-Now, Don Felipe ha bajado del avión Hércules del Ejército con chaleco antibalas y casco, al igual que el resto de la delegación española. En la base ha sido recibido con honores por el jefe de la TRT, Pedro Pérez García, y después de escuchar los himnos nacionales y de la Legión y de saludar a los mandos, ha recorrido las instalaciones y ha conversado con los militares para conocer sus experiencias.

El príncipe Felipe ha estado acompañado en esta visita, en la que se ha hecho una escala técnica en Kirguizistán, por el jefe del Estado Mayor de la Defensa, Félix Sanz; el secretario de Estado de Defensa, Constantino Méndez, y el director general de la AECID, Juan Pablo de Laiglesia.

Dos bases en una hora

El Príncipe se ha trasladado después a la base de Herat, donde ha inaugurado la nueva biblioteca de la base, que lleva su nombre. También ha acudido al Hospital ROLE 2, en el que ha saludado a varios pacientes ingresados y otros que esperaban consulta, y ha presidido el homenaje a los que dieron su vida por España frente al monolito dedicado a los fallecidos en Afganistán.

Tras la foto de grupo en la Plaza de España, ha tenido lugar el tradicional brindis por el Rey, el Príncipe transmitió "el afecto y el orgullo" del monarca Rey por los militares españoles destacados en las misiones internacionales de paz. Finalmente, se dirigió al aeropuerto de la base para inspeccionar las helicópteros Superpuma y Chinook y los vehículos blindados BMR con que cuentan las tropas españolas y emprender el viaje de regreso a España con su delegación.

Desplegados desde 2002

Qala-E-Now es capital de la provincia de Badghis, donde la Agencia Española de Cooperación Internacional y de Desarrollo (AECID) gestiona 10 millones de euros al año para desarrollar las estructuras de emergencia. Incluye una red de captación de agua potable, una mínima asistencia sanitaria, la construcción de carreteras -se han terminado ya 121 kilómetros, la reconstrucción de la pista eventual de aterrizaje para asegurar el abastecimiento logístico.

Las tropas españolas comenzaron su despliegue en Afganistán a partir de 2002. Además de los 220 militares de Qala-E-Now, hay otros 429 en Camp Arena y otros 52 en Camp Stone -ambos en Herat- y 25 en Kabul. A ello hay que sumar los 52 del destacamento de minas en Manas, en el cercano Kirguizistán, que sirve de base para el traslado a Afganistán.