Nedovic alegra la vida al Unicaja ante el Efes (74-79)

La puesta en escena del Unicaja fue casi perfecta. El equipo malagueño hizo gala de algo que no lo caracteriza especialmente, como es una fluida circulación de balón. Esto le permitió encontrar tiros liberados y alternar el juego interior y exterior. Así llegaron los triples de Salin y Shermadini anotaba con facilidad ante los rocosos pívots del Efes. Fue un duelo de pívots lo que marcó el arranque del choque, porque los puntos del georgiano encontraban respuesta en el bando contrario por medio de Stimac y Dunston. A pesar de esto, el mayor acierto exterior del Unicaja con cuatro triples en el primer cuarto y el mejor juego colectivo, seis asistencias, le permitieron mandar en el marcador (19-25).

Esta eficacia ofensiva le permitió seguir por delante, pese a que tenía un agujero en el rebote. El Efes se alimentaba de los rechaces ofensivos, y así siguió en el segundo cuarto. Como el equipo cajista sólo metió tres puntos en siete minutos, el cuadro turco se puso por delante en el marcador (31-28, min. 17). Plaza recuperó a su quinteto titular, porque esta vez Nedovic no fue el desatascador ofensivo. El serbio estuvo negado en su primera aparición en el partido, pues falló los cinco lanzamientos que intentó, dos de dos y tres de tres. Como Stimac estaba imparable, 10 puntos y 8 rebotes, Plaza recurrió a Augustine que no tardó en producir y permitió la igualdad al descanso, 35-35.

El Unicaja no corrigió los principales déficits que tuvo en la primera parte, el rebote y las pérdidas y esto le penalizó bastante. De entrada encajó un parcial de 0-7 al comienzo del tercer cuarto (42-35), pero se repuso bien con la inteligencia de Augustine y al fin los primeros puntos de Nedovic. Sin embargo, Stimac seguía anotando y el Efes mantenía una gran intensidad en todas sus acciones. La mayor velocidad del conjunto turco acabó imponiéndose y pasando factura al cuadro malagueño que pasó por serios apuros. La solución fue acercar el balón al aro y encontrar en Shermadini, lo que minimizó los daños y le permitió anotar (59-53, min. 30).

Para ganar el partido, el Unicaja necesitaba al mejor Nedovic. El serbio no había jugado un buen partido, pero cuando apareció lo hizo para romper el encuentro. Cuando salió a la pista en el último cuarto, el equipo malagueño perdía 64-57. Sus primeras acciones fueron dos asistencias para sendos triples de Suárez y McCallum y luego tocó a él anotar de tres. En sólo un minuto y medio le dio la vuelta al partido (64-66). Quedaban cinco minutos, pero el serbio entró en ebullición y ya nada puro pararlo. Anotó dos canastas más y luego asistió a Augustine (67-70). Aunque el Efes seguía en el partido con sus rebotes ofensivos, la mejoría defensiva del Unicaja echó el cierre a esta vía. Un triple más de Nedovic a falta de dos minutos sonó a sentencia con sólo dos minutos por jugar (69-75). La presión cambió de bando y las urgencias eran para un Efes que esta vez no encontraba el camino del aro. El Unicaja sumaba así su segunda victoria en la Euroliga liderado por un Gran Nedovic.