Secuestran a un anciano para robarle 80.000 euros y lo dejan atado a un árbol a 1.200 kilómetros de su casa

Ahora, parte de la banda ha sido detenida por la Policía Nacional cuando circulaban por Benalmádena a bordo de un Mercedes valorado en 100.000 euros que habría sustraído a otra mujer a la que, supuestamente, intentaron secuestrar con el mismo objetivo, aunque ella pudo escapar en el último momento aprovechando un descuido de sus captores. Dos de los cinco detenidos han ingresado en prisión.

Según el relato de la primera víctima, tres individuos de origen brasileño lo abordaron después de las 11 de la mañana del 24 de agosto. Tras amenazarlo con una pistola, lo obligaron a meterse en su propio coche, un Range Rover que también ronda los 100.000 euros.

Dos de los delincuentes ocuparon los asientos delanteros, mientras que el otro se subió detrás con la víctima apuntándole con el arma. Para terminar de asustarlo, le dijo que iba a buscar información sobre su familia. En el viaje, fueron haciendo paradas en los cajeros automáticos que encontraban para realizar reintegros con las dos tarjetas de crédito que el hombre llevaba encima.

Tras ser agredido, les facilitó sus claves de acceso a la banca electrónica a los secuestradores, que abrieron una cuenta a nombre de uno de los investigados, pero utilizando su DNI y una foto tipo 'selfie' tomada a la víctima en el que aparecía con la cara magullada por los golpes.

El viaje terminó a las tres de la madrugada del 25 de agosto en un bosque de la localidad catalana de Collbató. Los ladrones arrebataron el teléfono móvil al anciano, se llevaron su coche, y a él lo dejaron atado a un árbol. Una patrulla de la Policía Local lo encontró desorientado y con lesiones en la cabeza.

En la inspección ocular del bosque, los mossos d'Esquadra hallaron una pulsera que la víctima había perdido y un trozo de cuerda que los captores emplearon para amarrarlo. De igual modo, consultaron el geoposicionamiento de su teléfono, lo que les permitió determinar que habían hecho una parada en un cajero automático de Cambrils (Tarragona), y constataron que los asaltantes habían empleado las claves del anciano para transferir a sus cuentas un total de 84.093 euros. Los agentes detectaron 25 movimientos bancarios entre 17 cuentas.

Los investigadores pudieron reconstruir, a través de las cámaras de seguridad y los rastros que dejaba la tarjeta, el recorrido de uno de los investigados, que dejó el Range Rover aparcado en el aeropuerto de El Prat y se dirigió a Barcelona en un taxi que pagó con una tarjeta y después fue a una gran superficie y compró dos teléfonos móviles que también pagó con el plástico. La Policía Científica elaboró un estudio fisonómico de las cámaras de seguridad que permitió identificar al sospechoso y relacionarlo con las extracciones en los cajeros realizadas esa mañana. La jueza que lo investigaba ha enviado a prisión por secuestro, blanqueo y pertenencia a grupo criminal. Consultado al respecto, el abogado Pascual J. Molina, M&C Consulting, que lo asistió en su pase a disposición judicial, rehusó hacer comentarios sobre el caso.

En su decisión, ha pesado que el individuo, de origen brasileño, se encuentra en situación irregular en España, no tiene arraigo laboral y ha estado en constante movimiento entre Portugal, Francia y España mientras era investigado. Además, en uno de los registros realizados en la operación, se localizó una máquina para expedir pasaportes falsos, lo que, según fuentes judiciales, supone un evidente riesgo de fuga.

La jueza también tuvo en cuenta en su decisión el peligro de reiteración delictiva, ya que a los detenidos se les atribuye otro delito de similares características al primero cometido el pasado 12 de diciembre de 2023 en Portugal, cuando habrían intentado meter en los asientos traseros de un vehículo a una mujer a la que estuvieron esperando en las inmediaciones de su casa.

Aunque se trató de un secuestro fallido, lograron robarle el coche a la víctima y se dieron a la fuga en el vehículo, pero la Policía Nacional los interceptó cuando circulaban por Benalmádena. Los cinco ocupantes del vehículo fueron detenidos. Posteriormente, los mossos arrestaron a otros cuatro individuos como presuntos integrantes de la banda.