Prisión por amenazar de muerte al director del colegio de su hijastra tras una expulsión de tres días en Ronda

El hombre detenido por amenazar de muerte al director del colegio Juan Carillo de Ronda ha sido condenado a cuatro meses de cárcel después de que haya reconocido los hechos en un juicio rápido celebrado este martes. Así lo han precisado a SUR fuentes del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), concretando que, además, el juzgado le ha impuesto una orden de alejamiento respecto a la víctima de un año, periodo en el que tampoco podrá aproximarse al centro educativo.

El sospechoso, de 44 años, fue detenido por amenazar de muerte al director del colegio en el que estudia su hijastra. Al parecer, el sospechoso lo hizo a través de audios que envió a un grupo de WhatsApp que compartía con el resto de los progenitores de la clase de la menor, que había sido expulsada tres días por el centro educativo.

Esos audios se difundieron rápidamente al ser varias veces reenviado por los participantes del chat, llegando así a los miembros de la comunidad lectiva y al propio director, quien tuvo que ser asistido al sufrir una crisis de ansiedad tras acceder a los archivos. Posteriormente, interpuso una denuncia en la Comisaría de Ronda.

Según ha precisado la Comisaría Provincial, dichas amenazas estarían precedidas de las medidas tomadas por el centro educativo, que decidió expulsar tres días del colegio a la hijastra del detenido por comportamientos que entienden «graves e intolerables» respectos a otros compañeros de clase y maestros.

Aparte de la denuncia del director del centro, la familia de la menor expulsada también denunció a miembros del equipo directivo del colegio por supuesto «trato vejatorio y discriminatorio» hacia la niña. Finalmente, agentes adscritos al Grupo Operativo Local de la Comisaría de Policía Nacional de Ronda, junto a efectivos de Seguridad Ciudadana, han detenido al padrastro de la niña por su presunta responsabilidad en un delito de amenazas graves.

Los hechos han generado una gran alarma social entre docentes y familiares de estudiante. De hecho, el pasado viernes, día 6 de junio, el propio centro educativo convocó una concentración en repulsa de lo sucedido en la que se guardaron cinco minutos de silencio en favor de la convivencia, el respeto y los valores del centro.

Ese mismo día, a través de las redes sociales, el colegio emitió un comunicado: «Nos vemos en la obligación de alzar la voz ante unos hechos gravísimos que atentan directamente contra los valores que sustentan nuestra labor diaria como docentes».

En el mismo, continuaban denunciando: «La comunidad educativa de nuestro centro no solo es un espacio de aprendizaje, sino también un entorno de convivencia y seguridad. Los valores de nuestro centro solo pueden constituirse desde el respeto, el diálogo y la empatía. Cualquier atisbo de violencia e intimidación no tiene lugar en nuestra institución».

Las partes implicadas han sido citadas este martes ante el Juzgado de Instrucción número 3 de Ronda para juicio rápido, en el que el detenido se ha conformado con la pena solicitada por el fiscal: cuatro meses de cárcel y la prohibición de comunicarse y acercarse al director del colegio.

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