Los fallecidos por la DANA ascienden a 217

No obstante, la cifra de fallecidos, según los números del Centro de Coordinación Operativo Integrado (CECOPI) de Valencia y la Delegación del Gobierno en Castilla-La Mancha, se sitúa en los 214, de los cuales 210 se han producido en la provincia de Valencia, dos en Albacete (Letur), uno en Cuenca y, por último, una más en Málaga. Contando con los últimos hallazgos del domingo, el número crece hasta las 217 víctimas mortales.

«Es mucho peor de lo que se ve por la tele». Es un mensaje de un miembro del Ejército que llegó a última hora del viernes a la Comunidad Valenciana. Su móvil sonó a las 21:30 del jueves: «El viernes a las 08:00 en el cuartel. Vas a Valencia». Desde este fin de semana, su día a día se mezcla entre trasladar a compañeros y estar al tanto de lo que ocurre en La Huerta Sur de la comunidad. «Tenéis que estar preparados para lo peor», les advierten sus mandos.

Para este soldado del Ejército es su segundo día sobre el terreno, para muchos vecinos de Paiporta, Torrent, Algemesí, Xirivella, Catarroja, La Alcudia es el quinto día en el infierno. Aunque dentro de la tragedia, la vida se abre paso. A mitad de la tarde del sábado, la esperanza apareció: «Después de tres días, hemos encontrado a una persona con vida», anunciaba visiblemente Martín Pérez, responsable de Protección Civil de Moncada (Valencia).

Como ha ocurrido en Pedralba, a varios municipios valenciano9s aún no han llegado los militares. Para intentar acceder a esas zonas, este domingo llegan 5.000 uniformados más y otros 5.000 miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado para sumarse a las labores de búsqueda y rescate de víctimas de la DANA en lo que Pedro Sánchez, presidente del Gobierno, ha denominado como el mayor despliegue «en tiempos de paz».

A todos estos efectivos hay que sumarles otros decenas de miles de alistados en el batallón de la solidaridad. El sábado fueron 15.000 los voluntarios que acudieron en masa a la convocatoria en el Museo de las Artes y las Ciencias de Valencia. «Se han rebasado todas las expectativas», señaló el presidente de la Plataforma de Voluntariado de la Comunidad Valenciana, Miguel Salvador.

Este domingo se les podía ver nuevamente pertrechados con botas, guantes, mascarillas, cepillos y palas acuden para ayudar en la limpieza. «Mucho cuidado -señala el Ministerio de Sanidad-, las inundaciones pueden tener una influencia muy negativa en la salud a medio plazo». Por ello, el departamento de Mónica García ha emitido una serie de consejos. «Por favor, no os olvidéis también de cuidar vuestra salud mental. Son escenas muy duras», advierten los psicólogos especialistas en emergencias.

Sin embargo, para esta jornada dominical su afluencia fue mucho menor por razones mayores. La Generalitat había emitido una orden que limitaba a 2.000 el número de voluntarios que pueden acercarse a lo largo de mañana a este enclave para organizar los escuadrones de limpieza. «Son motivos de seguridad» ante la alerta declarada por precipitaciones importantes en la zona, arguía el Gobierno valenciano. Incluso llegó a ser de color rojo para el sur de la provincia, aunque a primera hora de la noche bajó a aviso naranja en el sur y amarillo en el interior, aunque manteniéndose todas las precauciones por la lluvia.

La Unidad Militar de Energencia (UME), la Guardia Civil, Protección Civil, Policía Nacional y los distintos cuerpos que intervienen en esta emergencia habían solicitado al CECOPI que se adopten medidas extraordinarias para limitar la circulación de personas no residentes en las zonas del área metropolitana de Valencia más afectadas por las inundaciones durante el domingo con el objetivo de garantizar la seguridad de la ciudadanía y facilitar los trabajos de emergencia.

Por esas mismas razones, y aunque en teoría este lunes retornará el flujo habitual de voluntarios, el CECOPI) ha prorrogado durante 48 horas más -al menos, hasta el miércoles próximo- la restricción de la circulación de vehículos particulares en las vías de acceso a los municipios más afectados por la DANA, una medida que lleva vigente desde el viernes por la noche.«Es imperativo que se reduzca la movilidad en esas vías porque existe riesgo extremo de colapso», advertía el conseller de Infraestructuras, Vicente Martínez Mus. En el mismo sentido, este lunes se suspenderán las clases en la ciudad de Valencia y localidades de su área metropolitana.

La DANA que provocó las riadas a principios de semana presenta ya sus últimos coletazos y lo hace nuevamente en forma de precipitaciones intensass, aunque claramente en menor cantidad que el martes. Aún así, la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) había activado para este domingo varias alertas en el litoral mediterráneo desde Alicante hasta Tarragona. Precisamente en esta provincia catalana Protección Civil de Cataluña había enviado un nuevo aviso a los teléfonos móviles de cuatro comarcas: Montsià, Terra Alta, Ribera d'Ebre y Baix Ebre.

El mensaje de las autoridades recordaba que las lluvias continuadas y torrenciales seguirían hasta el lunes y que era preciso extremar las precauciones, evitar desplazamientos innecesarios y alejarse de ramblas y barrancos. «Aunque no llueva, pueden bajar con intensidad y se pueden producir deslizamientos».

Asimismo, a primera hora de la noche del domingo había desactivado el aviso rojo por precipitaciones en la provincia de Valencia pero, advertía, en las próximas horas seguirá el peligro importante por lluvias fuertes en la Comunitat Valenciana y el sur de Catalunya. En algunas zonas continuarán durante la primera mitad de este lunes, por lo que los avisos están «en constante revisión». Durante toda la madrugada y la primera mitad del lunes sigue activado el aviso naranja por riesgo importante de precipitaciones en todo el litoral de Valencia y el de Castellón, así como en el litoral sur y prelitoral de Tarragona, según la última actualización meteorológica.