Arrestan por la violación grupal a una menor en 2020 en Valencia a uno de los dos fugados

Su detención se produce en virtud de la orden europea de arresto dictada por la Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Valencia después de que ya fuera localizado en la frontera con Alemania tras conocerse el fallo de la sentencia.

El tribunal que enjuició a cuatro jóvenes por la agresión sexual grupal a la menor, que fue forzada por cerca de quince personas en un paraje de una localidad de la comarca de la Vall d'Albaida, ordenó la búsqueda, detención e ingreso en prisión de los dos únicos condenados, a 20 y 12 años de prisión por las agresiones sexuales a la adolescente, después de que los dos penados no comparecieran en la vista convocada para analizar la posible adopción de la medida de prisión provisional tras la sentencia dictada el pasado 30 de junio.

El ahora arrestado en Bulgaria fue condenado a doce años de cárcel. La Unidad Sirene de Cooperación Internacional de la Dirección General de la Policía informó al juzgado el incumplimiento de la medida cautelar de prohibición de salida de España que pesaba contra él. En su caso la Sala dictó tanto la búsqueda, detención e ingreso en prisión en el territorio nacional como la emisión de una orden de detención europea con extensión internacional.

Tras emitir la requisitoria, el Tribunal envió una copia de la misma a Interpol y a Sirene para la búsqueda internacional del condenado. Y ordenó su ingreso en prisión una vez sea puesto a disposición de las autoridades españolas tras su arresto en Bulgaria.

Mientras tanto el otro condenado, sobre el que pesa una condena de 20 años de cárcel, la Audiencia Provincial de Valencia dictó un auto en el que decreta su búsqueda, detención e ingreso en prisión por no asistir a la comparecencia prevista «sin justificar la imposibilidad de hacerlo y al hallarse en paradero desconocido», pero no es una requisitoria europea y se limita a territorio nacional.

Los otros dos acusados llevados a juicio fueron absueltos por el tribunal. Uno de ellos, que sí participó en los hechos ocurridos en la vivienda deshabitada tras la agresión grupal en el paraje de esa misma madrugada, al no quedar probado que supiera la edad de la menor, y el otro fue absuelto del delito de corrupción de menores, ya que no se pudo acreditar que le pidiera a la víctima que le hiciera una felación a cambio de llevarla en su coche tras ser brutalmente agredida por más de una decena de personas.