El retorno de Patricia Llosa a Marbella
La exmujer del literato ha vuelto a recuperar su destino predilecto de verano donde se la ha visto arropada por su hijo y por su nuera
joaquina dueñas
Jueves, 18 de agosto 2016, 00:30
El apellido Llosa lleva ligado a la ciudad de Marbella desde que en 1984 la pareja formada por Mario Vargas Llosa y la que fuera ... su mujer, Patricia Llosa, recalara por primera vez en la Milla de Oro. Desde entonces, cada verano era común ver al literato recorrer las calles de la ciudad y participar de su vida social acudiendo a los toros, a conciertos o a reuniones con amigos. Aquello duró hasta que el año pasado la pareja vivió una tormenta marital, con Isabel Preysler en el ojo del huracán, que acabó en separación la separación del matrimonio poco después de celebrar en familia sus 50 años de casados y en el romance entre el Nobel y la reina de corazones. Llegó el verano, se sucedían noticias de desencuentros entre la ya ex pareja y por Marbella, ni rastro de ninguno de los dos. Pero el tiempo es el mejor bálsamo y un año después, consumado ya el divorcio definitivo entre los Llosa, Patricia ha recuperado su destino predilecto y la hemos vuelto a encontrar por estas tierras.
Flanqueada en todo momento por su hijo Álvaro y por su nuera, Susana Abad, se ha visto a una Patricia tranquila que ha salido cada mañana a caminar por el paseo marítimo, un ejercicio recomendado para todas las edades y que, según los profesionales de la salud, aporta tanto beneficios físicos como emocionales, algo que, a buen seguro, favorece su bienestar, ahora que, desde mayo, han quedado rotos todos los lazos con el que fuera su marido durante medio siglo. Con ellos también, acudió a ver el concierto de El gusto es nuestro dentro del Festival Starlite, disfrutando de los clásicos de Ana Belén, Víctor Manuel, Miguel Ríos y Joan Manuel Serrat.
La estancia de Patricia con su hijo Álvaro y su mujer permite intuir que la calma va regresando poco a poco al seno familiar y que, finalmente, la ruptura del matrimonio no ha acarreado mayores consecuencias en las relaciones paterno y materno filiales. Una calma que, sin embargo, estuvo precedida por algunas turbulencias ya que parecía que mientras Gonzalo y Morgana , hijos también de la pareja, permanecían del lado de su madre, Álvaro expresaba su respeto por la decisión adoptada por su padre de vivir su amor junto a Isabel Preysler.
Precisamente, ella fue también durante un tiempo asidua a Marbella y se la podía ver en reuniones de sociedad junto a su marido Miguel Boyer, que falleció en septiembre de 2014. La última vez que se tiene constancia gráfica de la estancia de Preysler en la ciudad fue en 2013 con motivo del concierto de su hijo Enrique Iglesias en Starlite, al que acudió acompañada por sus otras dos hijas, Tamara Falcó y Ana Boyer, pero no es la última vez que ha visitado la Costa del Sol, ya que, parece que la pareja pasó un romántico fin de semana a finales de febrero en un lujoso hotel marbellí con motivo del cumpleaños de ella.
Y así, mientras Patricia retornaba a su destino tradicional, que según el propio Vargas Llosa afirmó en la ceremonia de nombramiento como Hijo Adoptivo de la ciudad, «es un paraíso donde renazco y vuelvo a ser joven optimista y entusiasta», el Nobel y su pareja están recorriendo medio mundo, desde los Fiordos a Bali, pasando por las islas griegas. Parece que a sus 80 años renace y vuelve a ser «optimista y entusiasta» en cualquier parte del globo, pero siempre en compañía de Preysler.
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