La Cofradía de los Estudiantes celebra sus 75 años con una misa en la Catedral de Málaga

La celebración ha estado presidida por el obispo de la diócesis, Jesús Catalá, y ha contado con la presencia del alcalde, Francisco de la Torre; la concejala de Fiestas, Teresa Porras; la del distrito Centro, Gema del Corral; el edil el PSOE Salvador Trujillo; el diputado provincial Manuel Marmolejo; el vicerrector de Estudios de la Universidad de Málaga, hermana mayor honoraria de la cofradía, Ernesto Pimentel; el presidente de la Agrupación de Cofradías de Semana Santa y ex hermano mayor de la hermandad, Pablo Atencia; la presidenta de la asociación Alumni-UMA, Remedios Martel; y el director territorial de La Caixa, Juan Ignacio Zafra.

En su homilía, el obispo ha hecho alusión a la historia de la cofradía y ha valorado especialmente su implicación en proyectos de acción caritativa como la Fundación Corinto, las necesidades de la parroquia de los Santos Mártires, y la Fundación 'Casa del Sagrado Corazón-Cottolengo'. «Os animo a que mantengáis vuestra colaboración con la delegación diocesana de Pastoral Universitaria, para ayudar a los jóvenes a encontrarse con el Cristo de la verdad», ha señalado Catalá a los cofrades de Estudiantes. El prelado ha comparado la trayectoria de la hermandad con la de un río, y ha remarcado que «aún no ha desembocado en el mar, le quedan muchos más años recorrido», por ello ha animado a sus miembros a seguir «formando a las generaciones jóvenes, a este caudal fecundo que pasa por el mundo universitario».

Jesús Catalá también ha valorado especialmente la apuesta de Estudiantes por mantener sus actos por el 75º aniversario a pesar de la pandemia. «Lo más importante es que la fe no para, y el amor tampoco. Las cofradías no cierran, las Cáritas no cierran, las iglesias no cierran, las celebraciones no cierran... es importante que asumamos esto en estos momentos«, ha remarcado el obispo, quien también ha agradecido la presencia de las instituciones en la ceremonia y ha afirmado que las cofradías necesitan de su apoyo.

La misa, en la que se ha pedido especialmente por los enfermos y fallecidos en la pandemia y por el cese de esta crisis sanitaria, ha contado con la intervención del Coro Oficial de la Universidad de Málaga, la Orquesta Málaga Camerata, el tenor Luis María Pacetti, y la soprano Lourdes Martín-Leiva, bajo la dirección musical de Santiago Otero. Al finalizar la celebración, tras el canto del 'Salve Regina' a la Virgen de Gracia y Esperanza, se ha interpretado el 'Gaudeamus Igitur', característica banda sonora de la presencia en la calle de esta cofradía, y la composición vocal 'A Nuestra Señora de Gracia y Esperanza', obra del miembro del coro de la UMA Julio Martín. La camarera María Soledad Atencia ha leído la primera lectura y la segunda ha estado a cargo del ex hermano mayor de la cofradía Pedro Ramírez.

Para el montaje del altar, exornado con flores en tonos rojos y blancos por la empresa Pinsapo, se han empleado parte de la estructuras que se realizaron con motivo de la coronación canónica de la Virgen de la Soledad de Mena. La Virgen de Gracia y Esperanza ha estrenado para la ocasión un broche con el escudo de la cofradía realizado en oro por el joyero Manuel Fenoll, regalo de un grupo de hermanos.

Al término de la misa, que ha estado concelebrada por el deán de la Catedral, Antonio Aguilera, y el párroco de los Santos Mártires, Felipe Reina, el hermano mayor de Estudiantes, Jorge Alcántara, ha entregado medallas conmemorativas del 75º aniversario al vicerrector de la UMA, al presidente de la Agrupación de Cofradías, al alcalde y al obispo.

A esta histórica celebración han asistido representantes de las cofradías hermanadas con Estudiantes, que son Fusionadas, Sepulcro y la Cofradía de la Humildad de Vélez-Málaga; así como de las corporaciones del Lunes Santo y de la Congregación de Mena, cuya banda de música acompaña al Coronado de Espinas en la procesión del Lunes Santo. Debido a la pandemia, el traslado de las imágenes titulares de la cofradía desde la iglesia del Santo Cristo de la Salud a la Catedral y el correspondiente regreso se han llevado a cabo de forma privada.