LAS HOJAS DEL RÁBANO DE LA EDUCACIÓN MATEMÁTICA
EL FOCO ·
El énfasis en una mejor enseñanza de las matemáticas es, por fin, algo que nos haría más productivos y fuertes en el mapa de ese mundo cambianteEn Educación, en España, nos hemos especializado en discutir de lo banal e ignorar lo fundamental y, a ser posible, coger el debate por las ... hojas del rábano, como concertada o pública, para jamás ponernos de acuerdo en, por ejemplo, la necesidad de mejorar la formación del profesorado de Primaria. Disfrazamos de vital lo que nos polariza más, como la enseñanza de la religión o de valores éticos. Nos ha vuelto a pasar este verano con el currículum de Primaria de Matemáticas, en cuyo debate estábamos enfrascados hasta que los talibanes tomaron Kabul y nos hicieron recordar a aquella niña paquistaní, Malala, a la que tirotearon por querer estudiar. Su lección de coraje le valió el Nobel de la Paz. Para millones de niñas afganas no sabemos si el ejemplo de Malala será suficiente para quitarles el miedo.
Justo antes, les iba diciendo, por aquí estábamos con que si era necesario dar un enfoque más emocional a la asignatura para evitar cierta angustia con la que muchos se enfrentan a los números y poner más énfasis en cierta perspectiva de género para que las niñas no se crean peores que sus compañeros. Hay aspectos muy llamativos y decepcionantes en estos propósitos. De entrada, se vuelve a hablar de las niñas como necesitadas de algo más de ayuda cuando el fracaso escolar es masculino. Una vez más.
Hay quien mantiene que se pueden atacar varios problemas simultáneamente y con la misma importancia. Aunque bienintencionados, ignoran lo que es la construcción de una agenda política y mediática, que no es otra cosa que poner la lupa en unos problemas y dejar fuera de foco a otros, porque tenemos una atención limitada. Un ejemplo práctico y entendible es que si centras tu lucha en el derecho a ser mujer y poder volver a casa sola y borracha no es posible que te dediques, además, a darle la misma importancia a estudiar por qué tantas niñas musulmanas en España no llegan a la universidad y ni sueñan con unas cañas de cerveza en compañía. Qué temas son los primordiales en las sociedades occidentales según han sido fijados por la política es algo que a buen seguro conocen bien nuestros enemigos, como China y los fundamentalistas del islam.
Disfrazamos de vital lo que nos polariza más, como la enseñanza de la religión o de valores éticos
En cualquier caso, el énfasis en una mejor enseñanza de las matemáticas es, por fin, algo que nos haría más productivos y fuertes en el mapa de ese mundo cambiante. Y también ayudaría a mejorar los índices de fracaso escolar porque las matemáticas actúan a modo de vacuna contra él: los que en Primaria las dominan tienen muchas papeletas para acabar Bachillerato.
En otros países, como en Reino Unido, llevan años preocupados con la educación y las matemáticas. Hace ya más de diez años, la consultora McKinsey, en un informe sobre la educación en el mundo, concluyó que ningún sistema es mejor o peor que el conjunto de sus profesores. Por eso, volviendo a Reino Unido, desde hace varios cursos se pusieron en marcha círculos matemáticos en muchas ciudades, donde los maestros de Primaria, por ejemplo, pueden afianzar sus conocimientos de matemáticas con profesores de Universidad. Además, los británicos, a partir de 2022, pagarán más a los profesores de matemáticas porque, como ocurre en España, ya hay déficit, dado que ganan más en las empresas. ¿Qué hacemos aquí, además de dejar desiertas las plazas en las oposiciones? Pues ofrecer tan pocos puestos en el master del profesorado para Matemáticas que estamos haciendo ricas a las universidades 'on line'. Otro asunto que no está en la agenda de los rectores ni de los políticos.
Tampoco el mejorar la formación de los maestros de Primaria en esta asignatura. Está bien que el currículum aborde el aspecto emocional, una pena, sin embargo, que no trate sobre la ansiedad ante las matemáticas de muchos docentes, un fenómeno estudiado y contagioso. No parece disparatado pensar que si muchas maestras (me paso al femenino aquí porque son más del 80%) tienen cierta aversión a los números no sean unas entusiastas de la asignatura. Por eso mismo conviene aconsejar a los padres que no usen la frase de lo malos que eran ellos con las matemáticas para evitar que sus hijos se crean herederos de una estirpe maldita con los números.
La buena noticia es que las comunidades autónomas tienen muchas competencias en Educación. Así, la Junta de Castilla y León ha anunciado un programa nuevo para las matemáticas en Secundaria con un acuerdo con Estalmat, el programa del Estímulo del Talento Matemático que cuida, mima, forma a los niños que quieren ir mucho más allá de las exigencias escolares. Los que se batirán el cobre en la arena global con chinos e indios.
Hace ya varios años que Francisco Marcellán, presidente de la Real Sociedad Matemática Española, alertó en el Congreso sobre lo preocupante de la caída del nivel de formación de los que tenían que enseñar matemáticas. No le hicieron ni caso.
Desde entonces, la guerra cultural también ha llegado al álgebra. Jo Boaler, profesora de Stanford, es de las partidarias de aprender matemática con juegos y colaboración. En California van a acabar con la separación por niveles. A diferencia de la profesora de Stanford, Barbara Oakley, ingeniera y autora de numerosos libros sobre aprendizaje, cree necesario la repetición y la práctica continuada, como si se tratara de un lenguaje, que lo es. Ya hay vídeos paródicos donde se castiga a profesoras que mantienen que dos y dos son siempre cuatro.
Desde ya, en Afganistán, miles de niñas van a arriesgarse a seguir aprendiendo, como Malala, que dos y dos son cuatro y que siempre son demasiados los talibanes. Nosotros, mientras, a lo nuestro. Los enemigos asisten al espectáculo de la banalidad de los debates occidentales encantados. También aprender Historia es fundamental para no sorprendernos con el dominó de civilizaciones caídas.
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