Sin fórmulas magistrales
Isabel Naranjo
Miércoles, 22 de octubre 2014, 13:45
Secciones
Servicios
Destacamos
Isabel Naranjo
Miércoles, 22 de octubre 2014, 13:45
Llevar toda una vida en política, como suele reprocharse a no pocos cargos públicos en distintas esferas, no es garantía de éxito; incluso puede ser el origen de prácticas impropias del deber que terminan haciendo que alguno tenga que abandonar el cargo no precisamente por la puerta grande. Es lo que tiene el creerse dueño y señor del cortijo, tras años al frente del mismo.
Tampoco suele ser común, más bien se considera una osadía, irrumpir en el escenario político con aspiraciones, cuando ni siquiera se ha militado en las filas del partido de turno. Pero hay casos, aunque sean honrosas excepciones, en que la fórmula puede dar resultado.
El caso del alcalde de Estepona, notario y registrador de la Propiedad, con una dilatada trayectoria a sus espaldas, merece ser así considerado, a tenor del balance planteado ayer ante un foro de políticos y empresarios en la capital.
José María García Urbano accedió a la Alcaldía de un Ayuntamiento acosado por varios episodios de corrupción, que al igual que ocurriera de manera prácticamente coetánea en la vecina Marbella dejaron sus arcas en bancarrota y los juzgados de la localidad atestados de procedimientos de importantes magnitudes.
En su debe se le puede censurar la aplicación de un Expediente de Regulación de Empleo que afectó a 176 empleados municipales, en una plantilla a la que no todo el mundo accedió en igualdad de concidiones y habiendo cumplido los requisitos exigidos por ley, pero esa medida ha logrado aliviar el capítulo de Personal en los Presupuestos.
Como consecuencia de esa y otras medidas, y en su haber, el munícipe y las iniciativas derivadas de su programa electoral, prácticamente ejecutado en su totalidad en lo que va de legislatura, han propiciado una situación de superávit que no se recordaba en la localidad desde tiempos inmemoriales.
Lo cierto es que no hay nadie salvo la oposición -en su exigida labor de fiscalización del equipo de gobierno- que haya afeado la acción del ejecutivo local del PP en sus tres años y medio de andadura.
Está claro que no existen fórmulas magistrales -al menos nadie las ha descubierto hasta la fecha- que sean sinónimo de acierto en la gestión política; pero no es menos cierto que tener iniciativa, empuje, ganas e imaginación, máxime cuando uno no necesita vivir de ello como es el caso que nos ocupa, contribuyen a que las cosas salgan razonablemente bien.
Publicidad
Publicidad
Te puede interesar
Publicidad
Publicidad
Recomendaciones para ti
Esta funcionalidad es exclusiva para suscriptores.
Reporta un error en esta noticia
Comentar es una ventaja exclusiva para suscriptores
¿Ya eres suscriptor?
Inicia sesiónNecesitas ser suscriptor para poder votar.