Shaheen-Víctor: de la complicidad a la 'guerra fría' en un mes y medio
La relación entre el director general y el entrenador se deterioró en diciembre por discrepancias en el control de la planificación deportiva y el 'caso Salva'
En su comparecencia pública (primera en dos meses y seis días), el director general del Málaga, Richard Shaheen, no se refirió claramente al futuro de ... Víctor como entrenador. Primero habló de buscar «una situación de manera amistosa y satisfactoria para todos» y después, cuando se le preguntó quién dirigiría al equipo el martes (ante la Ponferradina), soltó un «todas las opciones están abiertas». Pero lo que quedó claro si se analizan bien sus palabras es la clara discrepancia existente entre ambos. Y en el club no ha pasado inadvertido el giro radical en la relación entre ellos, porque en apenas mes y medio se pasó de una enorme complicidad a una peculiar 'guerra fría'.
Cuando Shaheen leyó el viernes el comunicado, escrutado hasta la última coma, resultó llamativo que se hablara de «resolver la situación de manera amistosa y satisfactoria para todos» tras aludir a «conversaciones sobre los diferentes puntos de vista deportivos y los recientes acontecimientos extradeportivos». Es obvio que la comparecencia del director general obedeció a la difusión del vídeo íntimo del entrenador –la razón por la que este ha sido despedido–, pero el director general no quiso dejar pasar la ocasión de aprovecharla para referirse también a aspectos meramente futbolísticos.
Alusión al plan de viabilidad
Las declaraciones efectuadas por Víctor en la víspera del partido en Oviedo fueron el primer pulso a los propietarios, pero también un claro mensaje a Shaheen cuestionando su plan de viabilidad y la planificación deportiva que pretende el director general: «Llevamos mucho tiempo escuchando hablar del plan de viabilidad desde que llegó Richard, que además él lleva trabajando para el club desde hace más tiempo del que ha llegado aquí, para conocer los números y que había un plan que nos iba a aportar soluciones económicas. Si ha llegado el mercado de enero y ese plan no nos permite reforzarnos, sino que incluso lo que tenemos que hacer es vender jugadores que nos van a debilitar, pues yo no lo entiendo y no lo comparto».
El ejecutivo americano, que ha asumido el control de todas las parcelas, dejó claro que era el único interlocutor ante Manolo Gaspar
Efectivamente, Shaheen fue nombrado director general el 4 de noviembre, pero ya antes tomaba decisiones (en verano, como asesor directo de Abdullah Al-Thani) y se había convertido en principal interlocutor de Víctor incluso en las últimas semanas de Caminero como director deportivo. El director general se ganó pronto al vestuario al recalcar al entrenador y a los capitanes que los recortes nunca afectarían al primer equipo, de ahí los elogios a su figura en las primeras semanas.
A Shaheen y Víctor se les veía juntos con frecuencia e incluso en el viaje a Ponferrada (31 de octubre) fueron fotografiados tomando el AVE vestidos de chándal. Pronto, muy pronto esa complicidad comenzó a diluirse porque el director general, que ha asumido el control absoluto en todas las parcelas, dejó claro que él iba a ser el interlocutor directo del director deportivo, Manolo Gaspar. Las alusiones del americano a este en la rueda de prensa del viernes no fueron gratuitas. «Sus comentarios (los de Víctor el sábado anterior) no reflejan los planes del mercado de invierno que tenemos con Manolo Gaspar, con el que trabajo mano a mano». Más claro, imposible: dejó fuera de la ecuación al entrenador, que seis días antes había empleado en un momento dado la expresión «yo, como máximo responsable del tema deportivo...»
Comida en Soria
La ruptura fue evidente para los jugadores el viernes 29 de noviembre, en la comida en el hotel de concentración en Soria (el partido se disputó a las nueve de la noche). Ese día Shaheen ya no se sentó a almorzar en la mesa del cuerpo técnico (como era habitual), sino en otra, junto al médico, Daniel Rosado (que suele ejercer de traductor), y a un miembro del departamento de Comunicación.
Shaheen fue claro el viernes y dijo que en el mercado invernal trabaja «mano a mano» con el director deportivo
Junto a las discrepancias en la planificación deportiva (o más bien en quién debe ostentar el poder en la planificación deportiva) también conviene apuntar el 'caso Salva'. Como adelantó SUR, Víctor pretendía incorporar al exdelantero a su cuerpo técnico abonando personalmente sus emolumentos. En un principio Shaheen dio el visto bueno e incluso al que fuera entrenador del filial se le citó en las oficinas para firmar el contrato, pero posteriormente el presidente descartó la contratación (internamente se habla también de la influencia en esta decisión de Hamyan Al-Thani).
Además, Shaheen –es decir, Al-Thani– tampoco está muy conforme con la trayectoria del equipo, con un balance de sólo cuatro victorias en 23 partidos oficiales (incluido el descalabro en el campo de un rival de Tercera División). Es evidente que la destitución de Víctor obedece exclusivamente a la aparición de los «recientes acontecimientos extradeportivos» (como calificó el director general la aparición del vídeo íntimo del entrenador), pero no es menos cierto que las discrepancias ya eran demasiado notorias entre ambos cuando apenas mes y medio atrás se observaba una enorme complicidad.
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