Una aprobación sin consecuencias

LaLiga ha inscrito al Málaga en el torneo. El club de La Rosaleda forma parte de la relación de sociedades anónimas deportivas y clubes inscritos en la competición profesional de la LaLiga Santander y LaLiga Smartbank (que es el nuevo nombre oficial de la Segunda División), como acredita la Circular 6 del organismo y como se hizo público el lunes. Sin embargo, este paso no tiene influencia alguna en la crisis actual que experimenta la entidad de Martiricos, que sigue sin dar salida a traspasos o ventas importantes para poder hacer más fichajes ni cumple con el límite salarial.

LaLiga ha incluido a los 42 equipos (ya que no hay filiales en Segunda); es decir a todos, también a Las Palmas y el Granada, que han expuesto sus propias soluciones a sus dificultades actuales por el tope salarial. Sin embargo, el paso dado por la patronal de los clubes no ha sido más que la respuesta actual a una serie de trámites administrativos efectuados hace tiempo por todos los clubes para optar a la competición.

De esta forma, aunque la noticia podría interpretarse como un balón de oxígeno a diez días de que ruede el balón para el Málaga, en realidad no cambia en absoluto las cosas mientras el jeque mantenga paralizadas un sinfín de operaciones. Dicho de otra forma, es una aprobación sin consecuencias. El mejor ejemplo es que LaLiga tampoco excluyó al Reus o al Córdoba hace un año a pocos días de comenzar la temporada pese a que tenían evidentes dificultades con los salarios para inscribir jugadores. Es la muestra de que esta inscripción atiende a otra serie de pautas.

Así las cosas, a día de hoy el Málaga sigue necesitando agilizar el traspaso de Ontiveros, que se oficialicen las salidas de Cecchini (Seattle Sounders), Jony (Lazio), Ricca (Brujas) y Seleznov (que ya no se entrena con el equipo con permiso del club) y que se encuentre algún acomodo a dos jugadores con una ficha prohibitiva para el proyecto del club, como Juanpi y N'Diaye, que ni siquiera ha vuelto con el equipo pese a que se daba por hecho que ya debía haber retornado por estas fechas. Todas estas operaciones permitirían inscribir a Okazaki y dar margen para algún fichaje de aquí a finales del plazo del mercado.