El Málaga se nos fue a Cádiz en pleno carnaval y allí nos dio la mayor alegría de la temporada. O quizás la única. Por ... su cuenta y riesgo se metió en jarana y hasta fue capaz de bailar al líder, que seguramente no contaba con la atrevida respuesta de una murga malagueña. Ya era hora de que al buen fútbol que viene practicando el equipo de Pellicer (antes de Víctor Sánchez) le soplara un poco de fortuna al ver un penalti (que lo fue) a favor del equipo malaguista y no ver otro (que también lo fue) a favor del equipo local. Pero igualmente es justo reconocer que, error aparte, el Málaga fue muy superior durante todo el partido y el resultado, más que justo. Yo creo que esta victoria en el Carranza debiera servir de espoleta para que el equipo malagueño explosionara de una vez y convirtiera su juego en una suma de puntos, de tres en tres, suficiente para salir del atolladero en el que andaba metido y que podría abandonar definitivamente si mantiene la línea que tanto ha gustado en Cádiz. Sin ir más lejos, el domingo en La Rosaleda ante el Racing de Santander y siguientes… Por cierto que al mencionar al árbitro ya cometió un error de inicio al permitir que el guardameta local vistiera del mismo color (rosa o similares) que el equipo rival, el Málaga. No sé qué hubiera podido pasar en un saque de esquina o si el portero va a rematar en la última jugada. Pero, en fin, allá ellos.
Sin duda, el panorama del equipo va cambiando sensiblemente, no así el del club que cada día parece más insalvable. Si ha de decidir la Justicia está claro que, si las finanzas no hunden al equipo, la próxima temporada todo seguiría igual. Es por eso por lo que resulta apremiante una solución, la de convencer al jeque, por el medio que sea, de la venta del club. Es lastimoso de que el Málaga C. F. no pueda arrancar la próxima temporada con la vista puesta en la Primera División, la que le corresponde.
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