Becarios malagueños tienen que devolver 3,7 millones por no aprobar ni la mitad del curso
Educación mantiene abiertos casi 800 expedientes de reintegro para exigir la devolución a los que no lo han realizado de manera voluntaria
Los suspensos tienen sus consecuencias. Sobre todo para los estudiantes que disfrutan de una beca. En caso de que no se alcancen los resultados académicos ... previstos en la normativa de becas, distinta para los estudiantes no universitarios y los universitarios. Incluso dentro de la universidad los requisitos son distintos según la carrera que se estudia. De no cumplirlos, el Ministerio de Educación, que es quien en ambos casos, estudios universitarios o no universitarios, abona el importe de las becas, puede y, de hecho, reclama estas cantidades. El problema para los estudiantes y sus familias es que estas reclamaciones llegan varios años después: El ministerio cuenta con un plazo de tres meses a 4 años para exigir el reintegro de estas cantidades.
El Ministerio de Educación ha reclamado, mediante las oportunas notificaciones, 3,7 millones de euros, correspondientes a los tres últimos cursos (del 2014/15 al 2016/17), algo más de 3 millones para los estudiantes universitarios y 667.454 en el caso de los no universitarios (en este caso pueden solicitar beca los estudiantes de Bachillerato, FP, escuelas de idiomas o enseñanzas artísticas).
En el caso de los estudiantes universitarios, los expedientes abiertos en estos tres cursos han sido 1.239, de los que buena parte se han resuelto en el periodo de pago voluntario, 857, con un importe de algo más de un millón de euros ya devuelto por los estudiantes. Pero para los que no han reintegrado el importe de la beca en el periodo voluntario, el Ministerio de Educación ha abierto procedimientos de reintegro, que ya tienen un recargo del 20 por ciento por intereses de demora. Los expedientes iniciados son 382, con un importe reclamado de algo más de un millón de euros.
Por lo que respecta a los estudiantes no universitarios, los procedimientos de reintegro abiertos después de pasado el periodo de pago voluntario son 409, con una cuantía total de 667.545 euros.
Desde 2001 se exige a los becarios un determinado aprovechamiento académico. Hasta entonces solo con presentarse a un tercio de los exámenes podían disfrutar de la beca sin preocuparse de las consecuencias de su mayor o menor rendimiento en los estudios. Desde ese año, los estudiantes no universitarios tienen que aprobar al menos la mitad de las asignaturas, o la mitad de las horas en los módulos de FP. También es motivo de devolución causar baja en el centro antes de final de curso y no haber asistido al 80% o más de las horas lectivas. En el caso de las becas para los cursos de preparación para el acceso a FP o las escuelas de idiomas, no haber superado el citado curso.
En el caso de la universidad, el decreto de becas diferencia según las áreas de estudio. Para los estudiantes de las ramas de Ciencias e Ingenierías, deben superar el 40 por ciento de los créditos matriculados. Para el resto de carreras, el límite se fija en el 50% de los créditos matriculados en convocatoria ordinaria o extraordinaria. Para los que han solicitado beca en el caso de la realización del proyecto fin de grado, no haberlo presentado en dos años desde la fecha de la resolución de concesión de la beca.
En el último curso universitario con datos, el 2017/18, el número de becarios en la Universidad de Málaga fue de 12.677, con un promedio de ayudas recibidas de 2.122 euros.
El Gobierno mantiene los requisitos y aplaza al próximo curso su reforma
El Gobierno socialista ha defraudado a los estudiantes. Prometió modificar y revertir las reformas del PP, que endurecieron los requisitos para el acceso a las becas de estudios. Pero el proyecto de decreto de becas presentado esta pasada semana deja las cosas como estaban. No se modifican ni los umbrales de renta, ni el doble sistema de cuantía fija y variable. La prometida reforma quedará para el próximo curso, anunció la ministra de Educación, Isabel Celaá, decisión que se justifica por el adelanto electoral y la imposibilidad de afrontar esta reforma en periodo de interinidad.
Esta decisión no ha gustado a los estudiantes universitarios. El consejo estatal ha criticado este proyecto de decreto por «continuista, injusto e inflexible» que se basa en «tres umbrales de renta que todos los años deja fuera del sistema a miles de estudiantes».
Denuncia
En un comunicado, la asociación que reúne a los consejos de estudiantes de las universidades españolas denuncia que el decreto de becas, que mantiene el sistema variable que impuso el Gobierno del Partido Popular en 2013, «entiende la política de becas como un instrumento de mejora del rendimiento académico», algo que provoca que los estudiantes compitan «para obtener una cantidad irrisoria». Además, reprochan al Gobierno de Pedro Sánchez no cumplir sus «promesas» y le acusa de no querer consultar a este órgano sobre las becas.
El Ministerio de Educación establece tres umbrales de renta para poder acceder a una beca. Para una familia de cuatro miembros, el umbral 1 es de 13.909 euros. En este caso, la beca incluye matrícula, una cuantía fija de 1.500 euros, otros 1.500 euros si se estudia fuera del domicilio familiar y una cuantía variable que se determina en función del número de becarios y las notas. El segundo umbral se sitúa en los 36.421 euros. En este caso, los alumnos tienen derecho a la beca de matrícula y de residencia y la cuantía variable. El tercer umbral es de 38.831 euros. Para las rentas familiares situadas entre el dos y el tres, únicamente podrán tener derecho a la beca de matrícula. Las cuantías por renta y residencia son fijas, 1.500 euros en ambos casos, si no se supera el primer umbral de renta para la primera y dentro de los dos primeros umbrales para la segunda. Pero en el caso de la parte variable, para la que se tiene en cuenta la nota media y la renta familiar, dependerá del número de becarios y del presupuesto con que cuenta cada año el ministerio.
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