El auditorio empieza a sonar de nuevo en Málaga
Decíamos hace unas semanas por estos lares que el comienzo de la legislatura de Paco de la Torre resultaba inquietante, porque no se vislumbraba ningún ... proyecto en el horizonte de una manera real y efectiva. Pues bien, en los últimos días por fin ha aparecido uno ilusionante para la ciudad que parece que por fin vuelve a tomar impulso: el auditorio. Llevamos años y años oyendo hablar del mismo y al final siempre se chafaba por un motivo o por otro cuando parecía más que encarrilado, pues no hay que olvidar que incluso se llegó a firmar un consorcio para ponerlo en marcha. En esta ocasión parece que al fin se va a desbloquear. De entrada, la Junta de Andalucía en sus presupuestos ha incluido una partida de diez millones de euros. No está nada mal para empezar. Se ve que la mano de la malagueña Carolina España, consejera de Economía y Hacienda, ha tenido mucho que ver. Sabe que este tipo de proyectos salen adelante si alguna administración da el paso sin esperar a conseguir el consenso de todas, que es lo que ha estado pasando hasta ahora. Sin duda, es una buena noticia. La segunda administración en anunciar una partida para meter el hombro para esta gran infraestructura cultural fue la Diputación de Málaga, que en sus cuentas anuales ha incluido también un millón de euros. El alcalde de Málaga también ha anunciado que habrá una partida de cuatro millones para el auditorio en los presupuestos municipales que Carlos Conde, el concejal del ramo, ha presentado esta semana. No debe de haber problemas para que el puerto vuelva a ceder los terrenos para levantar el auditorio como ya hizo hace una década al consorcio que se formó con las administraciones y que se disolvió por la crisis económica que azotó al país en 2008. Falta por saber qué va a hacer ahora el Gobierno central, que tenía que aportar el 51% del coste de esta instalación cultural, que es fundamental para que Málaga entre en los grandes circuitos musicales y del espectáculo. La ciudad no pudo competir por los Grammy Latinos, que se celebraron en Sevilla, porque no tiene un recinto con grandes dimensiones para poder acogerlos. Málaga ya tiene hechuras de gran ciudad y por eso no puede quedar coja en el ámbito cultural. El puerto no puede oponerse a volver a ceder estos terrenos y hay que recordar que dos entidades privadas, como son Unicaja y Mayoral, gigante textil de la provincia, ya se comprometieron a ayudar con un diez por ciento a la construcción del auditorio. Quizá la entidad financiera podría hacer una aportación mayor, para contrarrestar la fuerte apuesta que va a hacer La Caixa con su edificio de Caixaforum enfrente de la comisaría provincial de Málaga. La entidad catalana cada vez tiene más presencia aquí e incluso puede disputarle el liderazgo a la todopoderosa Unicaja, que debe centrarse en crecer una vez que ya ha solventado sus problemas con los nombramientos de sus nuevos dirigentes. El Ayuntamiento de Málaga tiene que seguir buscando apoyos de la mano de la iniciativa privada con grandes empresas que no tienen que ser necesariamente de Málaga.
Estos movimientos hay que verlos también en clave eminentemente política, ya que las tres administraciones gobernadas por el PP (Junta, Diputación y Ayuntamiento de Málaga) han hecho piña para presionar de manera inequívoca al Gobierno central, que domina el PSOE. Se va a mirar con lupa qué se va a hacer en Madrid, porque no se entendería en Málaga que un proyecto de esta índole no tuviera el empuje necesario desde el Ejecutivo. Los diputados socialistas por Málaga deben presionar en ese sentido y el propio secretario general del PSOE, Dani Pérez, también tendrá mucho que decir, más que nada porque en ese asunto puede salir bastante escaldado si no se incluye una partida millonaria para el auditorio, que empieza a sonar como una realidad en Málaga.
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