Ultramar Calle Lagunillas, 62
Málaga a trazos ·
Se trata de un arte en declive que requiere destreza en la composición de formas y colores elementales
«Ultramar» es un vocablo amenazado a pesar de ser –probablemente- uno de los más bellos de nuestro idioma. Si bien su existencia parece ... garantizada dentro de la paleta de colores de un pintor, en el mundo del comercio es ya tan infrecuente como la propia habilidad de disponer los productos alimentarios en los escaparates mediante hileras que caracteriza al tipo de tiendas de esa denominación.
Se trata de un arte en declive que requiere destreza en la composición de formas y colores elementales: envases de café, latas de atún, dulces tradicionales y botellas de vino, y que es llevado a la excelencia en lugares como Casa Ceferina, en el barrio de Lagunillas. Su cristalera, que habría hecho las delicias de todo un Andy Warhol, se cubre con una marquesina en la que el establecimiento proclama con orgullo su condición de tienda de ultramarinos, junto a su antigüedad de 124 años. Sin embargo, este barrio ya no es el mismo de entonces; la droguería y el taller de enmarcado que había en la vecindad sucumbieron no hace mucho. No obstante, nuestros ultramarinos parecen tener todavía hoy una parroquia fiel, a la vista de las muchas personas que se agolpan ante su puerta.
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