Las promotoras ponen sus ojos en el único gran proyecto por encima de la ronda este de Málaga

Pese a la lentitud con la que avanza esta actuación, que tiene su origen en el Plan General del año 1997 y que ya contó con una primera aprobación en el año 2000 (lo que ahora se está tramitando es una nueva modificación de la ordenación del sector), son muchas las promotoras que en los últimos años se han interesado por la compra de estos suelos para desarrollar las viviendas unifamiliares previstas en ellos, junto con usos hoteleros, deportivos, comerciales, escolares y deportivos.

«Hemos tenido muchas llamadas de promotoras interesadas en el sector», han asegurado desde la sociedad Lagar del Conde, que posee más de la mitad de los suelos de El Lagarillo, en manos de una junta de nueve propietarios. «Las principales empresas inmobiliarias que actualmente están en la capital y en la Costa del Sol se han puesto en contacto con nosotros, porque es un proyecto que levanta mucho interés, pero por el momento no se ha cerrado la venta de los suelos», han aclarado.

Junto con esta sociedad, en la que actúan como gestores los hijos del que fuera propietario mayoritario de los terrenos, Francisco Mansilla, que entró en suspensión de pagos en los años noventa, los suelos están en manos del Banco Sabadell y Abanca (poseen el 15% en total); de otros tres propietarios con parcelas que se extienden hacia la zona norte del sector; y de tres sociedades que se reparten la propiedad del cortijo original de la familia Mansilla. «Una vez que tenemos la autorización ambiental de la Junta, nuestra intención es seguir adelante con la tramitación que resta en el Ayuntamiento para ir lo más rápidamente posible», ha comentado uno de los gestores del proyecto, quien ha admitido que «en algún momento llegará una promotora que alcanzará un acuerdo con la junta de propietarios para comprarlo todo».

No obstante, todo apunta a que, para que llegue ese momento, debe seguir avanzando la tramitación de proyecto, que deberá adaptarse a los condicionantes señalados en el informe ambiental de la Junta. Su ejecución está valorada en más de cien millones de euros. En concreto, se ha estimado que la urbanización de los suelos (363.014 metros cuadrados) supondrá un coste de unos 15 millones de euros, a los que se sumarán tres millones más para soterrar los cables de alta tensión que atraviesan la zona y otros dos millones para infraestructuras adicionales, como una nueva rotonda de conexión con la autovía. Además, las obras del proyecto en sí podrían rondar los 90 millones de euros.

En cuanto a la dotación de aparcamientos, la operación, que cuenta con el asesoramiento del arquitecto Antonio Valero Navarrete, prevé habilitar tres plazas dentro de cada vivienda (855 plazas), a las que sumarán 206 estacionamientos como mínimo en las parcelas para colegio, zona social, comercial y hotelera; y otras 265 plazas en las calles de la futura urbanización, que contará con 44.398 metros cuadrados de zonas verdes repartidas en varias parcelas. Las de mayores dimensiones estarán junto al trazado de la autovía, formando «grandes miradores sobre Pedregalejo y El Palo», han detallado desde la junta de propietarios.

La zona escolar y deportiva, así como la parcela comercial de 2.000 metros cuadrados de superficie (1.000 metros de techo), se ubicarán en la entrada a la futura urbanización, cuyas viviendas tendrá una altura máxima de planta baja más una.