Un paso muy complicado para el peatón
Cosas de la ciudad ·
Las aceras de la calle Marcos de Obregón miden apenas unos 60 centímetros, por lo que es muy difícil andar por allí sin tener que bajarse a la calzadaLas aceras de la calle Marcos de Obregón miden apenas unos 60 centímetros, por lo que es muy difícil andar por allí sin tener que ... bajarse a la calzada, con el riesgo de accidente que ello supone, según denuncia un ciudadano que se dirige a esta sección. Agrega además que una de las dos aceras de esa calle «siempre está cubierta de vegetación, y la otra tiene unos aparcamientos con vado autorizados por el Ayuntamiento y los coches ocupan parte de esos 60 cm», tal y como se observa en las imágenes que envía al periódico. «Los carritos de los bebés y las sillas de ruedas no tienen espacio para pasar», dice. Y añade que «en verano muchas personas aparcan en esta zona y circulan por estas aceras en doble dirección, que como se ve en las fotos es imposible andar a la vez en doble dirección».
A la vista de las imágenes y lo que manifiesta este ciudadano se hace uno a la idea de que el peatón lo tiene difícil cuando transita por ese tramo de esa calle. Una calle que además tiene una dificultad añadida a la estrechez de sus aceras y a los obstáculos que los transeúntes se encuentran cuando pasan por allí. Y es que tiene una pronunciada pendiente, lo que hace aún que sea más peligroso para el peatón que, ante la imposibilidad de seguir su camino por la acera, tenga que bajarse a la calzada y se exponga a ser atropellado por algún vehículo.
El asunto no sabemos qué solución tiene y si está en manos de los técnicos del Ayuntamiento de la ciudad que tienen competencia en el tema, pues la calle tiene las dimensiones que tiene y no da más de sí, salvo que se limiten los estacionamientos en la zona y se amplíe la superficie de las aceras.
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