Medio millar de personas marchan en Málaga por la soberanía de Andalucía y en defensa de lo público: «Caparrós vive»
En vísperas del 4 de diciembre, los asistentes corean el nombre del malagueño fallecido en las protestas por la autonomía y arremeten contra el gobierno del PP
Plaza de la Merced, doce del mediodía, en un domingo de manifestación. Los megáfonos están afilados y algunos altavoces suenan por encima de sus posibilidades. « ... Caparrós vive, la lucha sigue y sigue. Caparrós vive, la lucha sigue y sigue», retumba al paso por el Teatro Romano. Minutos antes, el tren de protesta se había puesto en marcha. Por delante, un recorrido por el centro de Málaga hasta llegar hasta el monolito levantado en honor a Manuel José García Caparrós, aquel joven que perdió la vida en aquella manifestación del 4 de diciembre de 1977, cuando, como miles de malagueños, salió a las calles para pedir la autonomía de Andalucía. A pocos días de esta fecha significativa en el imaginario de muchos, centenares de personas participaron este domingo en una manifestación por la soberanía de la región y en defensa de los sectores públicos. Congregados bajo el lema de «Andalucía por la soberanía, lo público y la paz», la manifestación estuvo secundada por diferentes partidos políticos. IU, Podemos, el PCPA y Primavera Andaluza
La asistencia a la manifestación rondó el medio millar. Al clamor por una mayor autonomía en la gestión política de los recursos públicos se sumaron continuas críticas al actual presidente de la Junta, Juanma Moreno, al que se tachó como responsable de diezmar a la sanidad y educación pública. Tampoco se salvó de los reproches el alcalde de Málaga, Francisco de la Torre, al que se culpó de perpetrar un modelo de ciudad que va contra los intereses de la mayoría de los malagueños.
Varios problemas fueron dándose durante la marcha y se vieron reflejados en las consignas. Algunas, gritadas con rabia como el «y dónde está Bonilla, Bonilla dónde está, Bonilla está vendiendo nuestra sanidad», que coreaba el líder local de Podemos y concejal de Con Málaga, Nicolás Sguiglia. Cánticos que se replicaban de forma machacona y que hicieron que el ambiente de domingo de paseo se mezclara con uno más reivindicativo. Algunos turistas pusieron la mira en las pancartas para descifrar de qué iba la cosa.
Desde hace tiempo, la llama del andalucismo se ha convertido también en un nicho de mercado para no solo reclamar una mayor autonomía política para la comunidad. Sino también una aspiración para proteger los sectores públicos, el derecho a la vivienda frente a la especulación y la identidad local frente a una turistificación masiva. La pregunta que surge tras la movilización de este domingo es si estos colectivos tienen la suficiente fuerza para hacer calar su mensaje en el resto de malagueños.
Esta movilización fue ideada por los grupos políticos mencionados al inicio de esta información. Que estuviera politizada no se escondió en ningún momento. En el mar de banderas andaluzas que ondeaban, la mayoría estaban identificadas con el nombre de los respectivos partidos políticos. En esta protesta, que discurrió sin ningún tipo de altercados, se pudieron ver también banderas republicanas y de Palestina. «Andalucía está con Palestina», se coreó con fuerza.
El 4 de diciembre figura marcado en rojo para aquellos que lo consideran el verdadero día en el que hay que celebrar la conquista de la autonomía andaluza. Este año cae en miércoles y se esperan actos reivindicativos de todas los partidos. Este domingo, el ala más a la izquierda del tablero político ya marchó por las calles de Málaga.
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