Málaga proyecta una planta para reciclar y vender los residuos del futuro contenedor marrón
El Ayuntamiento solicita una subvención para financiar la construcción de una estación de tratamiento que convertirá en compost la basura orgánica
El contenedor marrón empezará a ser una realidad en Málaga a lo largo de este año, lo que supondrá la presencia de un quinto ... depósito de basura al que deberán ir a parar los residuos orgánicos. Con este paso, la ciudad cumplirá la directiva de la Unión Europea que obliga a la recogida separada de estos residuos antes del 1 de enero de 2024, pero también abre la puerta a una nueva fuente de ingresos para las arcas públicas, ya que estos desechos se pueden reutilizar para hacer compost y comercializarlo como abono para jardinería. Para ello, el Ayuntamiento tiene previsto construir a lo largo de 2023 y 2024 una planta de tratamiento de biorresiduos en el Centro Ambiental de Los Ruices, que está valorada en 4 millones de euros4. Aunque la factura municipal que saldría de Limasam podría verse reducida en un 40%.
O es lo que pretende el equipo de gobierno, que este viernes ha aprobado solicitar una subvención (sería de de 1.631.257,20 euros) convocada por la Junta de Andalucía destinadas a proyectos de construcción, adaptación y mejora de instalaciones específicas para el tratamiento de los biorresiduos recogidos separadamente que se financiará con cargo a los fondos Next Generation, que son el instrumento de emergencia activado por la Unión Europea para ayudar a los Estados a recuperarse de la crisis provocada por el Covid-19.
El proyecto de la planta incluye un sistema de tratamiento completamente independiente de los actuales sistemas de tratamiento mecánico biológico existentes en Los Ruices. Contempla tres áreas diferenciadas con la finalidad de realizar una producción de compost de alta calidad mediante el compostaje de los residuos orgánicos: área de pretratamiento y selección; área de compostaje automático; y área de afino.
En el área de pretratamiento se realizará una clasificación de los residuos concentrando la parte orgánica y eliminando la mayor presencia de impropios, tales como plásticos, bolsas, metales. Posteriormente, el residuo orgánico seleccionado se enviará a un proceso de compostaje de volteo automático, realizando la fermentación de los residuos durante un tiempo de unas 5 semanas. Finalmente, los residuos compostados pasarán para ser 'limpiados' de impropios mediante una serie de equipos que configurarán la línea de afino.
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