Buscan desde el martes a una mujer que no acudió a recoger a su hijo al colegio

La secuencia de los hechos arranca el martes por la tarde, cuando la sala del 092 de la Policía Local de Málaga recibió una llamada realizada desde un centro educativo situado en el distrito de Carretera de Cádiz. Los responsables del colegio comunicaron a los agentes que una madre no se había presentado a recoger a su hijo al salir de clase y el pequeño se encontraba solo. También les advirtieron de que no era la primera vez que sucedía algo parecido.

Una patrulla municipal adscrita a la jefatura del mencionado distrito avisó a los efectivos de Grupo de Investigación y Protección (GIP), especializado en este tipo de casos, que se desplazaron al lugar para indagar en lo ocurrido. Agentes de paisano acudieron a la vivienda donde la mujer y el niño se habían estado alojando en las últimas semanas, un piso de la zona, propiedad de una amiga de la madre que decía haberles dejado una habitación mientras ella encontraba trabajo y un domicilio definitivo.

Los policías locales que se habían hecho cargo del pequeño se entrevistaron allí con la dueña de la vivienda, quien al parecer les explicó que esa mañana había visto a la madre recoger sus pertenencias y las de su hijo, por lo que pensó que se iba a mudar a otro inmueble, según relataron fuentes cercanas al caso. Sin embargo, cuando los policías entraron en la habitación que ambos ocupaban, encontraron tan sólo la maleta del menor, pero no la de su progenitora.

Los agentes se desplazaron a las dependencias de la Unidad de Policía Autonómica, adscrita a la Junta de Andalucía, para que se hicieran cargo del niño, ya que al parecer no tiene familiares en la provincia de Málaga. Acto seguido, el pequeño fue ingresado en un centro de protección mientras prosiguen las gestiones para localizar a la madre y esclarecer el caso.

La Policía Local de Málaga envió un oficio a la Fiscalía de Menores para que tuviera conocimiento de lo que había sucedido y, paralelamente, avisó a las Fuerzas de Seguridad del Estado por si la madre, que es de origen magrebí, trataba de abandonar el país, según informaron las fuentes consultadas.

Tras esa primera intervención, el caso ha pasado a manos de la Unidad de Familia y Mujer (UFAM) del Cuerpo Nacional de Policía, que se ha hecho cargo de las pesquisas para intentar encontrar a la madre. Ayer, fuentes próximas a la investigación confirmaron que aún no había sido localizada.