La Policía también vincula al detenido por las agresiones sexuales en Teatinos con un intento de violación
Al hombre de 28 años se le relaciona con un caso ocurrido el pasado diciembre en el distrito de Cruz de Humilladero por la ropa hallada en su habitación
Juan Cano
Viernes, 25 de septiembre 2015, 01:04
El presunto agresor sexual en garajes de Teatinos ya está detenido. El sospechoso es un joven de 28 años, identificado como J. C. E. N., ... natural de Madrid pero que desde hace un tiempo residía en Málaga, más concretamente en el barrio de la Trinidad, donde fue arrestado ayer por la Policía Nacional.
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Compartía piso con dos mujeres
La investigación, en la que han participado agentes de la Unidad de Familia y Mujer (UFAM), del Grupo de Homicidios y de la comisaría del distrito Norte, lo señala como presunto autor de las dos agresiones sexuales en garajes de Teatinos, pero también se le relaciona con otro intento de violación a una mujer el pasado diciembre en el distrito de Cruz de Humilladero.
Las pesquisas se centraron en J. C. E. N., que al parecer fue grabado por una cámara de seguridad poco después del último ataque, según las fuentes consultadas. Los investigadores averiguaron que el sospechoso, que se movía en bicicleta, residía en la calle Pizarro, en pleno corazón de la Trinidad. Tenía antecedentes por delitos contra la propiedad, pero ninguno de carácter sexual.
Ayer, poco después de la una de la tarde, el individuo salió de su domicilio y se dirigió a un establecimiento cercano, donde fue detenido por los policías que le seguían la pista. Acto seguido, fue conducido a su vivienda, situada en el número 10 de la calle, para realizar un registro. El arrestado compartía piso con dos mujeres y el novio de una de ellas.
Los agentes inspeccionaron cada palmo de su habitación para tratar de encontrar pruebas. Pero también localizaron un segundo escondite, una zona común de un bloque donde el sospechoso guardaba, además de su bici, algunas prendas de ropa que encajarían con las descritas por las víctimas de las agresiones sexuales, según ha podido confirmar SUR.
Registro
El registro de estos dos escenarios no sólo permitió relacionarlo con las agresiones sexuales de Teatinos, sino que ha permitido imputarle la presunta autoría del intento de violación sufrido por una mujer en otro garaje de la calle Alcalde Díaz Zafra el diciembre pasado, a la que supuestamente agredió con suma violencia ante la fuerte resistencia que ofreció; incluso, habría tratado de meterla en el maletero. También le atribuyen, de momento, media docena de robos en coches en los garajes donde presuntamente cometió cada uno de los ataques sexuales que se le imputan.
Los policías se incautaron además de diferentes dispositivos electrónicos cuya procedencia está siendo investigada. Tras más de dos horas de registro, sobre las 16.30, los agentes sacaron al detenido del piso y lo introdujeron en un coche camuflado para trasladarlo a comisaría. En la calle, apostados tras el cordón policial, lo esperaban numerosos vecinos, que lo despidieron entre gritos e insultos.
Poco después, el subdelegado del Gobierno, Miguel Briones, y el comisario provincial, Pedro Garijo, dieron una rueda de prensa para confirmar oficialmente la detención del sospechoso y lanzar un mensaje de tranquilidad tras la alarma social creada por estos sucesos, que han tenido en vilo durante los últimos días a los vecinos de Teatinos.
El modus operandi es muy similar en los tres casos, lo que lleva a la policía a pensar en un único autor, ya que el agresor sexual «actuaba solo», como subrayó el comisario provincial. Tras el intento de violación en Alcalde Díaz Zafra, el mismo individuo habría vuelto a actuar el 1 de septiembre en un garaje de la calle Carlos Cano, donde robó en el interior de cinco vehículos. Al verse sorprendido por una vecina, la persiguió hasta el ascensor, la maniató con cinta aislante y abusó de ella mientras la amenazaba con un destornillador.
La secuencia es casi idéntica a la del miércoles, cuando entró en un garaje de la calle Gregorio Prieto y forzó seis turismos. Pero con una diferencia. En este caso, fue él quien sorprendió a una chica que estacionó su coche y, tras amenazarla con un cuchillo, la maniató con el cinturón de seguridad y la obligó a mantener relaciones. En ambos casos, sustrajo las tarjetas de crédito a las víctimas y les exigió el número secreto bajo la advertencia de que, si le habían dado uno falso, volvería para matarlas.
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