El Papa no participa en los ejercicios espirituales de la Curia por un resfriado

Lo comunicó él mismo al finalizar el rezo del Ángelus que, como cada domingo, dirigió desde la ventana de su estudio en el Palacio Apostólico del Vaticano, justificando su ausencia por el resfriado que arrastra desde hace días. El pasado jueves la Santa Sede informó de que el Pontífice sufría una «leve indisposición» que provocó la cancelación de varias audiencias, aunque mantuvo su misa matutina en la Domus Santa Marta, la residencia vaticana donde vive, y los encuentros privados que allí desarrolla.

«Os pido un recuerdo en la oración por los ejercicios espirituales de la Curia romana. Por desgracia, el resfriado me constriñe a no participar este año. Seguiré desde aquí las meditaciones. Me uno espiritualmente a la Curia y a todas las personas que están viviendo estos momentos de oración, haciendo los ejercicios espirituales en casa», dijo el Papa tras finalizar el rezo del Ángelus.

El pasado miércoles, durante la celebración de la audiencia general en la plaza de San Pedro del Vaticano, ya se veía a Francisco algo resfriado y con la voz ronca, una situación que probablemente empeoró con las ceremonias que presidió por la tarde con motivo del Miércoles de Ceniza. Primero ofició en la iglesia de San Anselmo en el monte Aventino de Roma la liturgia de las estaciones para, a continuación, participar en la procesión penitencial hacia la basílica de Santa Sabina, donde presidió la misa con la imposición de las cenizas. En esas celebraciones «agarró frío», contaron fuentes vaticanas.

Fue al día siguiente cuando el director de la Sala de Prensa de la Santa Sede, Matteo Bruni, explicó que el Pontífice sufría una «leve indisposición», por lo que «prefirió quedarse en los ambientes cercanos a Santa Marta» y no acudió a la basílica romana de San Juan de Letrán, donde tenía previsto mantener la habitual liturgia penitencial con el clero romano con motivo del inicio de la Cuaresma. El resto de los encuentros previsto en su agenda «proceden regularmente», comentó Bruni, que el viernes confirmó que Francisco tampoco participaba en otras dos audiencias. El portavoz aclaró no obstante que el Papa saludó al final de la misa en Santa Marta a los presentes, como es habitual.

La coincidencia del resfriado de Jorge Mario Bergoglio con la epidemia de coronavirus que sacude Italia propició la preocupación en algunos por si se hubiera contagiado el Papa, al que este domingo se vio en buen estado de salud mientras dirigía el rezo del Ángelus en la ventana del Palacio Apostólico en un día fresco y ventoso en Roma.